El pasado viernes aparecía en la estación de Cercanías del aeropuerto de Málaga el cadáver de un hombre, al parecer indigente, atado con bridas de pies y manos. Y los datos de la autopsia no han hecho más que aumentar las rarísimas circunstancias del suceso porque el hombre tenía sus genitales metidos en latas de atún y dos lonchas de jamón sobre sus nalgas. Además, la autopsia apunta a una muerte por asfixia por su propio vómito. No obstante, estos resultados provisionales están pendientes de que se realicen estudios histopatológicos, químicos y toxicológicos.La Policía Nacional mantiene abierta una investigación tras este hallazgo, ocurrido en la mañana del pasado viernes en la zona cercana a la estación del tren de Cercanías. El cuerpo estaba inmovilizado y semidesnudo, según fuentes cercanas al caso, y por el momento no se descarta ninguna línea de investigación sobre las circunstancias de la muerte.
Los investigadores encontraron junto al cadáver diversos enseres personales que pertenecerían al fallecido, quien utilizaba un carro portaequipajes para transportarlos. Entre ellos, se halló diversa documentación que ha permitido identificar a la víctima. Se trata de un ciudadano inglés de 51 años con las iniciales S. F. A., quien al parecer podría sufrir algún tipo de enfermedad mental.
Al lado del banco donde yacía el cuerpo se encontraron también envases vacíos de bebidas alcohólicas, que sugieren que el hombre, por el olor que desprendía, se encontraba en estado de embriaguez.
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