Una madre mata a puñaladas a su hija de 5 años y se suicidia en Aranjuez

  • La agresora, de 40 años y nacionalidad española, avisó a sus familiares por Whatsapp que iba a quitarse la vida. Primero apuñaló a su pequeña y después se incrustó el arma blanca en el tórax.

    "Estamos consternados, pero no puedo asegurar que Laura tenía antecedentes psiquiátricos", aseguran los vecinos de la calle del Mar, en el citado municipio.

Los Bomberos, en la puerta de la casa donde ocurrieron los hechos.
Los Bomberos, en la puerta de la casa donde ocurrieron los hechos.
Diego Caldentey
Diego Caldentey

Primero recibieron un mensaje escueto, aunque escalofriante. El marido, el cuñado, la suegra y otros amigos de Laura G. G., una mujer de 40 años, de nacionalidad española, que residía en el municipio de Aranjuez, Madrid, comenzaron a leer en sus aplicaciones de  whatssapp un texto donde ésta les advertía que iba a quitarse la vida.

Alarmado, uno de sus familiares la intentó localizar por teléfono, y otras personas respondieron al mensaje de inmediato para pedirle que se calmara, pero ya no hubo más comunicación. Entonces, el cuñado de la mujer acudió de inmediato a su vivienda, pero nadie abrió la puerta. Se supone que, a esa altura, la madre de una niña de 5 años ya había matado a su hija. Minutos después se suicidió.

El municipio se encuentra por estas horas consternado por lo ocurrido. El suceso ha ocurrido en un barrio residencial y muy tranquilo, de casas bajas, en la vivienda situada en el número 22 de la calle del Mar.

"Me acabo de enterar de todo esto, porque hoy -inevitablemente- será la comidilla del día. La noticia realmente nos impacta, aunque no puedo asegurar que la mujer tuviese antecedentes psiquátricos como se dice por ahí", comenta a lainformacion.com Nayuska, quien trabaja en el club infantil 'Laberinto', un establecimiento situado a escasos metros del lugar de los hechos.

Los Bomberos de la Comunidad de Madrid acudieron a la vivienda, alertados por el familiar de las fallecidas, ya que éste no podía acceder a la vivienda. La madre de la menor había colocado un pesado sillón del otro lado del acceso, para impedir el paso.

Pasado el mediodía de este jueves, los bomberos finalmente forzaron la puerta de entrada de la casa y se encontraron con una escena sórdida. El cuerpo de la pequeña yacía en el salón de la casa y, a escasos centímetro suyos, se encontraba el de la madre. Los cadáveres se encontraban tendidos sobre un charco de sangre. La menor había recibido una puñalada en el abdomen, según han comentado portavoces de Emergencias 112.

La progenitora, en tanto, también se había quitado la vida con la misma arma blanca, incrustándosela en su tórax. Los facultativos del Summa solo pudieron certificar los fallecimientos, dada la gravedad de las lesiones que presentaban. Las heridas les han producido la exanguinación (pérdida masiva de sangre).

La Policía local recibió el primera de aviso a las 12.16 horas exactas, alertando de un posible intento de suicidio en una vivienda. Quien había notificado del hecho era otro de los familiares, que había recibido el mensaje de la agresora.

Según han indicado fuentes policiales, la principal hipótesis, a falta de los informes forenses, que se conocerán en breve, es que se trata de un parricidio y la madre ha matado a su hija y posteriormente se ha suicidado. En el barrio han comenzado a circular rumores y versiones, que ya han sido recogidas por la Policía, sobre aparentes antecedentes psiquiátricos que la mujer padecía. La familia residía en la vivienda de la Calle del Mar desde 2015. No existían denuncias de violencia de género, según ha confirmado el Ayuntamiento del municipio.

Este jueves ha sido particularmente violento en la Comunidad de Madrid. Casi en simultáneo al parricidio de Aranjuez se ha registrado otro espeluznante suceso: esta vez un nuevo caso de violencia de género que se ha cobrado la vida de una mujer, quien fue degollada en el municipio de Fuenlabrada.

La víctima, de 26 años, fue asesinada por su novio, que ha sido detenido por la Policía tras avisar a su suegra de lo que había hecho.

Tras cometer el homicidio, el propio agresor ha llamado a su suegra para confesar lo que había hecho y se ha quedado en el lugar, donde ha sido detenido. En este caso tampoco se habían denunciado hechos previos de violencia de género. Tanto la fallecida como el asesino son de nacionalidad española.

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