Canadá teme una oleada de sobredosis tras detectar la droga W-18 en sus calles

  • El W-18 es un opiáceo 10.000 más potente que la morfina y 100 veces más potente que el temido fentanilo, sintetizado en 1981.

    Según los datos recogidos por los investigadores canadienses, algún laboratorio de narcotraficantes ubicado en China ha logrado replicar la fórmula.

Las primeras pastillas de W-18 fueron incautadas mezcladas con pastillas de fentanilo
Las primeras pastillas de W-18 fueron incautadas mezcladas con pastillas de fentanilo

Las autoridades canadienses tuvieron que hacer una campaña especial el pasado verano tras detectar la aparición de Fentanilo en las calles, después de varias muertes por sobredosis.

Esa alerta se queda ahora en segundo plano después de que la Policía de Calgary incautase en dos ocasiones pastillas de un potente fármaco llamado W-18, que nunca se ha fabricado legalmente por una farmacéutica.

Después de las cientos de muertes por sobredosis relacionadas con fentanilo el pasado año, las autoridades canadienses están seriamente alarmadas y advirtiendo al público sobre la nueva y extremadamente letal droga que se detectó en el oeste del país.

El W-18 es un opiáceo sintético 10.000 más potente que la morfina y 100 veces más potente que el temido fentanilo.

Fue a finales del mes pasado cuando la policía de Calgary hizo saltar las alarmas al ser informada por un laboratorio de que, entre las pastillas incautadas en una redada, se hallaban tres pastillas de W-18.

Durante 2014, al menos 120 personas murieron en la ciudad de Alberta tras consumir fentanilo. En 2015, cuando las muertes habían doblado a las del año anterior, el Alberta Law Enforcement Response Team declaró el fentanilo la droga más en alza del año.

Ahora, su temor es que el potente W-18 entre en ese circuito de drogas recreativas, ya que puede causar una oleada de muertes.

Nunca probado en humanos

El W-18 se debe a la tarea investigadora del profesor Ed Knaus, de la Universidad de Alberta, en Canadá, que trabajaba para crear un analgésico concentrado para remediar los dolores más agudos. 

En 1981 sintetizó un opiáceo que bautizó como W-18 y que tenía un poder analgésico 10.000 veces más potente que la morfina.

Pero como tantos otros ensayos de investigación, el hallazgo no salió del laboratorio y nunca se ensayó en humanos, al detectarse que tenía un extremo poder adictivo.

Ahora, según los datos recogidos por los investigadores canadienses, algún laboratorio de narcotraficantes ubicado en China ha logrado fabricar esa fórmula y la está comenzando a mover en las calles, sin que las personas que la adquieren puedan llegar a saber qué están comprando.

Debido a que nunca se ha probado en seres humanos, las autoridades solamente pueden hacerse una idea de los efectos que puede producir, que irían en la línea de otros opiáceos, aunque muchísimo más acentuados: sueño profundo, euforia, picor e hiperventilación, hasta el punto de poder provocar la muerte si la dosis es ligeramente elevada.

Mostrar comentarios