El PSOE ve en la propuesta de Iglesias una maniobra electoralista

Escépticos. Es la palabra que resume la reacción que la propuesta de Pablo Iglesias ha provocado en un sector del PSOE, el más crítico con el secretario general, Pedro Sánchez.

La oferta de iniciar unas negociaciones para un acuerdo de "progreso", planteada por el líder emergente tras reunirse este mañana con Felipe VI, no ha movido un ápice el pronóstico de parte de los socialistas, contrarios a un acuerdo con Podemos. Aunque Iglesias parece priorizar ahora la agenda social sobre la exigencia del referéndum en Cataluña, en buena parte del PSOE siguen recelando de una propuesta que entienden como una clara maniobra electoralista de Podemos.

"Si no hay gobierno puede ser un camino para echar las culpas a Sánchez", sostienen fuentes socialistas. Iglesias, sostienen, trataría ahora con exigencias como la de colocarse como vicepresidente de ese futuro Ejecutivo-que en Ferraz genera un rechazo consensuado-de presionar para que el PSOE se rechace la oferta, lo que abocaría a unas nuevas elecciones. En ese caso, los socialistas quedarían como responsables de no haber aceptado el conformar una alternativa al PP. Iglesias, por el contrario, saldría reforzado: él lo ha intentado, ha tomado la iniciativa de plantear una propuesta de cambio.

"La dirección socialista le responderá", sostiene otro dirigente. Entre las condiciones, Iglesias pretende colocar también a su círculo más cercano en puestos estratégicos del nuevo Gobierno. Por ejemplo, ha avanzado en rueda de prensa, que un miembro de En Comú Podem, la coalición vencedora en los comicios en Cataluña, asuma un ministerio destacado para desarrollar esa propuesta de convivencia en el Estado.

Los socialistas no ven ningún acuerdo claro. El exdiputado socialista Eduardo Madina ha sido rotundo al calificar la propuesta de "intento de humillación" al PSOE."Se parece mucho más a un intento de humillación al Partido Socialista que a una voluntad real de negociar nada",ha manifestado Madina, que compitió con Sánchez por la secretaría general, en un comentario en su cuenta personal de Twitter.

En su comparecencia, Iglesias no ha evitado las broncas al PSOE, lo que ha provocado las críticas airadas en el PSOE. El diputado reprochó el "inmovilismo" del partido para desencallar el gobierno y ahondó en las fracturas abiertas que plantea la batalla del liderazgo. Sánchez tiene ahora la oportunidad de hacer ver quién "manda" en el PSOE, dijo en referencia clara a la presidenta andaluza. "La posibilidad histórica de ser presidente de Pedro Sánchez es una sonrisa del destino que me tendrá que agradecer", ironizó también.