FRANCIA. FAES ALERTA DE QUE FRANCIA SE JUEGA EN LAS LEGISLATIVAS LAS REFORMAS O EL “BLOQUEO RECURRENTE”

- Considera que con Macron el sistema político francés tiene ante sí la oportunidad de “reformarse a sí mismo”. La Fundación para el Análisis y los Estudios Sociales (FAES), que lidera el expresidente del Gobierno José María Aznar, considera que con la victoria de Emmanuel Macron en las elecciones presidenciales francesas el sistema político de este país ha ganado una nueva oportunidad de “reformarse a sí mismo”, pero alerta de que hay “mucho en juego” en las elecciones legislativas del 11 y 18 de junio.
En el último número de ‘Papeles FAES’, Eduardo Inclán, profesor e historiador de la Universidad de Toulouse II-Le Mirail, advierte de que del resultado de las próximas semanas dependerá que el nuevo presidente “pueda hacer funcionar el sistema político o caer en el boqueo recurrente en el que lleva la República desde 1997”.
En este análisis, se celebra que con la derrota de la ultraderechista Marine Le Pen en las elecciones presidenciales el sistema político francés haya ganado una nueva oportunidad de “reformarse a sí mismo” y, de esta forma, consolidar los “tímidos” cambios legales introducidos desde 2014 para modernizar las empresas y su marco competitivo.
Sin embargo, avisa de que la realidad es que la clase media francesa “tiene aún miedo a los cambios” y que “el sector primario ha sufrido una gran caída”. Todo ello unido a la corrupción de los políticos, lo cual “ha tapado los esfuerzos por presentar una nueva Francia”.
Ahora, prosigue el texto, Macron ha heredado este “proyecto reformista” con un “optimismo ilimitado” al pedir a la sociedad que rechace el miedo al terrorismo y abogar por la modernización empresarial y educativa. Pero todo ello, precisa el autor, “pasa por obtener un buen resultado en las elecciones legislativas de junio”.
En las próximas elecciones se elegirán 577 candidatos en las circunscripciones y en ellas, considera FAES, “se unirá lo mejor de la política experimentada con la renovación deseada” por Macron para Francia. “Hay mucho en juego en las próximas semanas en Francia y de ello dependerá que el nuevo presidente pueda hacer funcionar el sistema político o caer en el boqueo recurrente”, precisa.
El documento finaliza con una reflexión en clave europea, porque el “éxito” de un modelo reformista en Francia también contribuiría a poner en marcha el proyecto europeo “a medio plazo”, lo cual es “un objetivo irrenunciable para no caer en la irrelevancia”. “Una crisis puede ser una oportunidad tanto para los ganadores como para los derrotados. Pronto lo sabremos”, concluye.