El ingreso a la OCDE permite un "salto de calidad" en las políticas de Estado, dice Bachelet

"La OCDE va a ser un invaluable aporte, un gran acompañamiento que nos va a permitir dar un salto de calidad en todo aquello que se refiere a las políticas de Estado", dijo la mandataria en el Palacio de La Moneda.

Chile se convirtió hoy en el trigésimo primer miembro de la OCDE, conocida como el "Club de los países desarrollados".

En París, donde se encuentra la sede de la OCDE, el secretario general del organismo, el mexicano Ángel Gurría, entregó al ministro chileno de Hacienda, Andrés Velasco, el acta de invitación para el ingreso de su país.

Bachelet indicó que la admisión de Chile en la organización demuestra que "da confianza y estabilidad", lo que se traducirá en importantes beneficios para el país.

"Afuera se nos verá con mejores ojos, con menor riesgo país, lo que se va a traducir en más inversión extranjera, pero también en mejores condiciones de financiamiento para los inversionistas locales", apuntó.

"Podemos sentirnos legítimamente orgullosos, pero a la vez humildes, y asumir este logro como una gran oportunidad para ingresar a un grupo de países con los que ahora vamos a poder compartir las lecciones que aprendieron en este salto al desarrollo", agregó la mandataria.

A su juicio, el ingreso a la OCDE tendrá consecuencias concretas no sólo para la economía chilena, sino también para los trabajadores y sus familias, por lo que espera que contribuya a generar "un círculo virtuoso de más empleo y de mayor calidad".

La gobernante definió a Chile como un país de "vocación latinoamericana", perspectiva que tratará de llevar a la OCDE, y subrayó que el ingreso al organismo no lo convierte en un país rico.

Bachelet también se mostró convencida de que el país podrá aprovechar las experiencias y el "saber acumulado" de los miembros de la organización en áreas como la lucha contra la pobreza, la modernización del Estado o la innovación tecnológica.

La presidenta chilena tiene prevista para hoy una reunión con el vicepresidente y canciller de Panamá, Juan Carlos Varela, quien consideró que la participación de Chile en la OCDE puede ser "muy importante" para lograr la salida de su país "de cualquier tipo de lista negra o lista gris".

En tanto, Rafael Guilisasti, presidente de la Confederación de la Producción y el Comercio (CPC), la principal patronal de Chile, dijo que es positivo tener la referencia de economías más desarrolladas.

"Si bien el ingreso no produce efectos inmediatos, nos permite formar parte de un grupo de países a los cuales Chile debe mirar en el futuro para alcanzar los niveles de país desarrollado", indicó en un comunicado.