Barcelona 19 dic.- Más de 180.000 personas que huyen de la violencia en Irak se han refugiado en Kirkuk y viven en refugios deficientes, donde padecen dolencias e infecciones debido a la falta de comida y agua, según ha alertado hoy la organización Médicos Sin Gronteras (MSF) en un comunicado.
MSF ha hecho un llamamiento general a entidades y organizaciones internacionales para proporcionar recursos a las miles de personas que se refugian en Kirkuk y en otras zonas.
El coordinador general de MSF en Irak, Fabio Forgione, ha reiterado que "hay muy poca asistencia internacional", siendo Médicos sin Fronteras la única organización médica internacional que ha proporcionado asistencia en esta zona.
Forgione ha remarcado que "la ayuda procede en su mayor parte de organizaciones locales, lo que es claramente insuficiente", por lo que necesitan que "las organizaciones internacionales de ayuda humanitaria den un paso adelante en sus esfuerzos en todo lo posible".
Según la organización médica, cerca de dos millones de iraquíes han abandonado en 2014 sus casas debido al conflicto armado.
Hasta ahora, ha explicado el coordinador general de la entidad en Irak, "la respuesta internacional se ha centrado principalmente en el Kurdistán iraquí", donde hay abiertos varios campos para personas desplazadas y fondos procedentes de donantes internacional.
Sin embargo, ni los fondos ni la asistencia internacional ha llegado a otras zonas, también accesibles para la ayuda internacional, como en el caso de Kiruk.
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