"Cómicos corporativos" llevan el humor a cursos de formación para empresas

  • "Cómicos corporativos" es una iniciativa puesta en marcha por actores y expertos en formación de recursos humanos, con el fin de formar a directivos y empleados de empresas a través del humor y la magia de parodias y "sketches" hechos "a la carta" para cada empresa, y mejorar así la productividad.

Madrid, 27 may.- "Cómicos corporativos" es una iniciativa puesta en marcha por actores y expertos en formación de recursos humanos, con el fin de formar a directivos y empleados de empresas a través del humor y la magia de parodias y "sketches" hechos "a la carta" para cada empresa, y mejorar así la productividad.

El fundador de la iniciativa Rafeek Albertoni explica, en una entrevista con Efe, que conoció el sistema en su país, Brasil, donde varias compañías llevan unos diez años haciendo cursos de formación a través de teatro cómico, y decidió "coger la idea y adaptarla al humor español".

Albertoni señala que el objetivo del proyecto es "desarrollar un sistema de enseñanza que tenga un autocontenido técnico de excelencia empresarial pero con un formato distinto de los que ya existen y que a veces no son pragmáticos", con la ventaja de que, además, al enseñar a través del humor "la gente tiene la capacidad de memorizar más lo que aprende".

"Cómicos corporativos" tienen algunos espectáculos ya preparados, como "Ganar el tiempos revueltos", comenta Albertoni, que "es un espectáculo motivacional y de clima laboral para tiempos de crisis", pero también efectúan nuevas propuestas de cursos en función de las necesidades y competencias que solicite la empresa que les contrata.

Además de los cursos formativos, también desarrollan eventos empresariales, en los que los actores hacen presentaciones de un producto o servicio o actúan en eventos, convenciones y reuniones, transmitiendo el mensaje de una forma activa llena de humor y magia.

Empresas como Microsoft o Multiópticas ya han apostado por este tipo de formación "a la carta" que mezcla artes escénicas, técnicas de "coaching" y de la llamada programación neurolingüística, y el impulsor de la iniciativa asegura que los resultados han sido "muy buenos" y han tenido "bastante aceptación".

"Si quieres resultados distintos, tienes que hacer cosas distintas", afirma Albertoni, pues "en tiempos de crisis las empresas necesitan empleados proactivos que crean en sus proyectos", y esto es lo que intentan conseguir, una mayor implicación y mejores resultados a través de una educación más emocional y humana y menos técnica.

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