"El Brujo" pide una regeneración apoyada en la cultura y "la gente decente"

Mérida, 4 ago.- Rafael Álvarez "El Brujo", que representa estos días en el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida "La Odisea", de Homero, opina que están pasando cosas "escandalosas" en la sociedad y, por ello, reclama una "regeneración" en la que la cultura, los sabios y "la gente decente" cobren protagonismo.

"Están pasando cosas muy fuertes" en cuanto a la organización de la sociedad o el funcionamiento de las instituciones, ha lamentado el actor (Lucena, Córdoba, 1950) en una entrevista con Efe.

Antiguamente, a su juicio, es posible que hubiera el mismo nivel de "corrupción", pero la gente, dice, era más "ingenua".

"Ahora, la gente sabe que esto es un cachondeo...hace falta una renovación", afirma el actor, que en su montaje de la obra clásica ha colado en el mítico viaje de Ulises a políticos como Mariano Rajoy, temas "sagrados" como el fútbol y críticas como la subida del IVA a la cultura.

La "regeneración" que "El Brujo" plantea pasa por "la reivindicación del papel de la cultura y de las élites, de los sabios, de los maestros, de la gente decente y de la gente que sabe, que muchas veces se ve, no son los políticos".

Según el actor, "cualquiera puede ser alcalde o presidente de una institución"; "tú los ves que hablan y no saben..., es peligroso", ha advertido.

En su adaptación de la obra de Homero, que también dirige, busca acercarse al "lado oscuro" del ser humano que encarna Ulises y que el hombre pretende obviar.

En este sentido, ha comentado a Efe que los políticos no se atreven a decir la verdad, lo que a su juicio es "un síntoma de inmadurez de la sociedad".

No obstante, añade, ahora "los palos son tan fuertes", que no se puede "hablar tanto para no decir nada".

"Lo sustancial es por qué la crisis, qué enseña y cómo sacar algo positivo de una experiencia tan dura", indica este actor, que en su juventud emigró unos meses a Alemania.

Ahora deja el país gente con carrera y con idiomas, un fenómeno positivo a su entender, porque su formación les permite encontrar salidas laborales en otros lugares.

Una de las cosas que le "desconciertan" es el IVA que se aplica al fútbol, al que tratan con temor: "¡cuidado con esta gente!".

"Yo podría entender que, en una situación absolutamente extrema, el Estado tenga que coger dinero porque no hay", pero del fútbol, señala, podría sacar "muchísimo" más.

La cultura, en su opinión, está sometida a "un desgaste que puede uno llegar a pensar que es premeditado, porque, ponerle al fútbol el IVA al 10 por ciento y al teatro el 21... parece que hay un interés en que la gente vaya al fútbol y deje de ir al teatro", advierte.

"El Brujo" asegura que a él, si fuera ministro de Cultura, le daría mucha "vergüenza" tener que responder a esto.

A las contradicciones del ser humano se enfrenta en "La Odisea" en solitario, con tres músicos como única compañía, porque busca el terreno en que él es "más fértil": "En el monólogo yo puedo dar lo mejor de mí mismo como actor", indica.

En este sentido, se refiere al "fenómeno curioso" de los monologuistas, más relacionado en su opinión con la "cultura del entretenimiento" y que a él no le gusta mucho, aunque "todo el mundo tiene derecho a hacer de todo", admite.

Es actor de cine, de televisión y, fundamentalmente, de teatro, porque éste tiene para él "algo que alimenta, que es la atención del público", el cual deja de pensar de una forma atropellada y "vive ese instante de su vida de una forma más intensa".

"La Odisea", una coproducción del certamen emeritense, de Producciones "El Brujo" y Teatros del Canal, se representa en el Teatro Romano hasta mañana, domingo, y, posteriormente, del 8 al 12 de este mes.

El siguiente trabajo teatral de "El Brujo" será en Madrid con la obra "Las mujeres de Shakespeare".-