El director Roberto Lozano relata la labor de los reporteros de guerra en un documental

  • Valladolid.- El día a día de varios corresponsales de guerra españoles que se encuentran en algunas zonas en conflicto más peligrosas del planeta es el asunto central del nuevo largometraje documental del realizador vallisoletano Roberto Lozano, que ya ha terminado prácticamente el rodaje.

El director Roberto Lozano relata la labor de los reporteros de guerra en un documental
El director Roberto Lozano relata la labor de los reporteros de guerra en un documental

Valladolid.- El día a día de varios corresponsales de guerra españoles que se encuentran en algunas zonas en conflicto más peligrosas del planeta es el asunto central del nuevo largometraje documental del realizador vallisoletano Roberto Lozano, que ya ha terminado prácticamente el rodaje.

Los informadores que relatan su labor cotidiana frente a la cámara son David Berain y Sergio Caro en Afganistán; Hernán Zin en Kenia, Ruanda y Congo; Mikel Ayestaran en Irak, y Gervasio Sánchez en Bosnia Herzegovina.

Los reporteros han sido filmados sobre el terreno en sus lugares de trabajo, donde se trasladaron el propio Lozano y el director de fotografía de la película, Roberto Fraile, pero también en España, donde, por ejemplo, el equipo rodó en el MUSAC de León con Gervasio Sánchez junto a su exposición "Desaparecidos".

Además, el documental, que se estrenará el próximo otoño, recoge entrevistas a periodistas españoles que han vivido de cerca las guerras y sus consecuencias como Arturo Pérez-Reverte, Rosa María Calaf, Ramón Lobo, Maite Carrasco, Javier Balauz, Alfonso Rojo y Olga Rodríguez.

El contenido no se queda ahí, puesto que, como Lozano (Valladolid, 1968) ha reconocido en declaraciones a Efe, este nuevo trabajo, cuyo título será previsiblemente "Los ojos de la guerra", es una película con "varias caras".

La cinta habla del "ser humano" y de sus conflictos, de lo que nos "lleva a luchar" y a resolver las disputas a través de "la violencia en su máxima expresión", ha subrayado Lozano.

La labor de estos periodistas y cómo las nuevas tecnologías han cambiado el trabajo de los reporteros de guerra son otras de las vertientes del trabajo de Lozano.

En "muchos momentos" del rodaje temieron por su vida, ha reconocido el realizador, lo que hace que "valores más el trabajo de esas personas" que durante meses y años "se juegan la vida" para contar lo que sucede.

"Los medios de comunicación han olvidado el trabajo de estos reporteros en los últimos años", ha incidido Lozano, "sólo buscan que estén sobre el terreno sin que transmitan historias humanas".

En un país en conflicto "no es fácil" rodar porque, a las dificultades del conflicto, se unen los controles administrativos, ha apuntado.

En Irak, por ejemplo, la "seguridad es tan grande" que obliga a llevar a cabo trámites burocráticos "muy largos", ha añadido Lozano.

Respecto a los informadores que perdieron su vida trabajando en zonas envueltas en conflictos, Lozano ha señalado que la presión de este trabajo a veces es "tan grande que les lleva a arriesgarse, incluso más de la cuenta" donde ha puesto el ejemplo del corresponsal Miguel Gil que falleció en el 2000 en Sierra Leona.

Para este director el corresponsal se ha convertido a su vez en un "arma de guerra" porque los combatientes se han percatado de que los periodistas pueden hacerles "mucho daño" por lo que se han convertido en un "potencial enemigo", aumentando así el peligro al que estos profesionales se exponen.

El documental invita a una reflexión sobre "la violación de los derechos humanos y si merece la pena llegar a un extremo como la guerra", que es un personaje más dentro de la película.

"El ser humano es el único animal que produce una violencia tan grande y elevada a la máxima expresión", ha explicado Lozano refiriéndose a los conflictos bélicos.

El proyecto comenzó en diciembre de 2008 y le llevará casi tres años terminarlo porque, en palabras del director, el documental es un género "muy costoso de tiempo" que suele estar "menos valorado que la ficción" pero que acarrea "más tiempo y esfuerzo".

"El documental cuenta lo que los medios de comunicación no cuentan en profundidad", ha expresado Lozano, que ha indicado que en los últimos años se está desarrollando "mucho" este tipo de cine.

Autor de otros documentales de carácter social como "Dibujos de luz" o "El mensajero del sur", protagonizado por el jugador de baloncesto Pau Gasol, Lozano ha indicado que le interesa mucho "el otro" refiriéndose a los demás.

El realizador vallisoletano ha afirmado sentirse cómodo en el documental porque es su "pasión" y ha resumido que le interesa "mucho más la realidad que la ficción".

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