Mérida, 25 oct.- El Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, que contará nuevamente con Jesús Cimarro como director artístico, busca patrocinadores privados y mecenas, después de que Caja Extremadura haya retirado su aportación de 100.000 euros y el Ministerio de Cultura haya reducido la suya en un 25%.
La consejera de Educación y Cultura, Trinidad Nogales, ha comparecido ante los medios acompañada de Cimarro para hacer balance de la 58 edición del festival, que ha concluido con un superávit de 343.876 euros -198.040 del Festival de Teatro, y 145.835 de los Premios Ceres y los Talleres que se han realizado en 20 municipios.
Esta cifra es la diferencia que existe entre el total de los 1.897.455 euros presupuestados para el Festival de Teatro, los Premios Ceres y los Talleres, y lo que finalmente se ha gastado.
Sin embargo, la próxima edición del festival se quedará sin los 100.000 euros que Caja Extremadura aportó en la pasada edición, a lo que también hay que restar la reducción del 25% de la partida que el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), del Ministerio de Educación, Cultura y Deportes, destinará y que se quedará en 187.500 euros.
Ya en la 58 edición no se contó con la partida de 64.000 euros que tradicionalmente venía aportando Caja Duero en ejercicios anteriores, aunque esa carencia, según Nogales, se ha podido suplir gracias al superávit alcanzado en esta última edición.
La consejera ha precisado que ya se está trabajando en la 59 edición para la que se están buscando partidas procedentes de otras áreas transversales como Comercio, Industria o Turismo. Además, dado el carácter internacional del certamen, se prevé recabar fondos de programas europeos a partir de 2014.
También ha remarcado que por primera vez la dirección del Festival de Mérida presenta sus cuentas de manera exhaustiva y detalla todas las partidas con sus correspondientes pagos y facturas.
Sobre la deuda que arrastra el certamen, el gerente del Festival de Mérida, Pedro Blanco, ha explicado que existe deuda en distintas fases: "Mucha que se ha pagado; otra que está en fase de comprobación, y otra que ha tenido que ir a los tribunales porque no está nada claro".
En cuanto a la última edición, Cimarro ha dicho que ha sido complicada pero satisfactoria, con éxito de público y superávit económico, en la que se ha conseguido devolver al Festival su esencia grecolatina y recuperar su imagen como referente de las artes escénicas del país.
En la pasada edición, 53.906 personas asistieron a las 37 funciones de los seis espectáculos que se ofrecieron en el Teatro Romano, lo que supone un aumento del 26,5% respecto a la anterior. La recaudación en taquilla por la venta de entradas ascendió a 1.144.000 euros.
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