El payaso en activo más famoso, D.Larible, dirige "un circo" en el Price

  • Madrid.- David Larible, el payaso en activo más popular del mundo, el único poseedor, junto al fallecido Charlie Rivel y el octogenario Oleg Popov, del Clown de Oro de Montecarlo, dirigirá en el Price de Madrid "un circo" en el que conjugará las claves de tradición y vanguardia que le han dado su fama.

El payaso en activo más famoso, D.Larible, dirige "un circo" en el Price
El payaso en activo más famoso, D.Larible, dirige "un circo" en el Price

Madrid.- David Larible, el payaso en activo más popular del mundo, el único poseedor, junto al fallecido Charlie Rivel y el octogenario Oleg Popov, del Clown de Oro de Montecarlo, dirigirá en el Price de Madrid "un circo" en el que conjugará las claves de tradición y vanguardia que le han dado su fama.

Larible (Novara, Italia, 1957) explica en declaraciones a Efe que el espectáculo que se estrenará el 3 de diciembre en el Price, "Vuelve al Price por Navidad", es una exhibición de los números circenses por excelencia, protagonizados "por la elite" del trapecio, la báscula o la contorsión, y con sorpresas "inéditas" en las que "la tecnología estará al servicio de la emoción".

"He querido un espectáculo que puedan ver niños muy pequeños pero que también puede emocionar a una pareja de 30 años", asegura Larible que cree que el circo sigue siendo un espectáculo "súper vigente y en perfecto estado de salud".

Acaba de hacer una investigación en el Archivo de Circo italiano y ha descubierto que en 1953 ya había periódicos que hablaban de que el circo desaparecería porque estaba en crisis.

"Mientras haya público dispuesto a asombrarse, a vivir un momento mágico, a disfrutar con lo inédito, a disfrutar con las sorpresas, el circo existirá", vaticina el artista, que cuenta en su "legión" de seguidores con famosos como Danny de Vito, Francis Ford Coppola, Leonardo di Caprio o Steven Spielberg, a los que conoció en sus 15 años de trabajo en Estados Unidos.

El italiano, en gira con el Roncalli por Alemania hasta mediados de diciembre, es el primer payaso de un circo tradicional que ha sintetizado la virtuosidad del viejo musical y del clásico clown con un repertorio con nuevas tendencias como la interpretación lírica rusa y el espectáculo callejero aparecido en Europa a comienzos de los 80.

"Combino el estilo de la Comedia del Arte con la improvisación, con la interacción con el público, por eso cada función es distinta de las otras, aunque haga unos pequeños gag al comienzo para 'adivinar' si es un público más intelectual, más popular o más picarón", desvela.

El payaso, afirma, debe ser camaleónico, transformarse en función de su público, que no sólo cambia de Estados Unidos a España, por ejemplo, sino de Zaragoza a Barcelona, y adivinar, "como un psicólogo circense", que es lo que más les gusta y llevárselo a su terreno.

Para Laribe, que ha actuado en el Madison Square Garden, con el circo Ringling, ante 120.000 personas en un solo fin de semana, la comunicación con el público nunca ha sido un problema, y es tan capaz de actuar en África como en China porque, señala, "ahora que nadie calla, la gente agradece que le cuenten cosas sin palabras, que llegan en vena al corazón".EFE

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