Falcones dice que sus lectores le escupirían si sus finales no fueran felices

  • El escritor Ildefonso Falcones cree que las novelas merecen finales felices y las suyas los tienen porque, bromea, "no podría pedir a los lectores que lean 750 páginas y que el libro termine mal", ya que le "escupirían" por la calle.

Madrid, 26 abr.- El escritor Ildefonso Falcones cree que las novelas merecen finales felices y las suyas los tienen porque, bromea, "no podría pedir a los lectores que lean 750 páginas y que el libro termine mal", ya que le "escupirían" por la calle.

Así lo ha expuesto el novelista barcelonés en una entrevista con Marta Robles en el programa "Entre comillas" de Efe Radio, en la que se distancia de otros escritores que en sus obras "matan al personaje o te lo dejan tieso", porque, a su juicio, los lectores prefieren "suspirar y sentirse satisfechos" al acabar el libro.

"Hay muchos finales felices diferentes, pero hay que elegir", afirma el autor superventas, que tras las exitosas novelas "La catedral del mar" y "La mano de Fátima" vuelve a liderar las listas de libros de ficción más vendidos en España con "La reina descalza".

Para esta obra estuvo documentándose "tres años y pico", porque, subraya, la novela histórica exige garantizar todos los detalles, desde las formas de viajar hasta las comidas que se describan.

Que lo contado sea lo más próximo a lo real es "un derecho del lector", dice Falcones.

El escritor, que continúa ejerciendo como abogado pero ya solo a tiempo parcial, "con más tranquilidad", ahora con socios en el bufete, confiesa que la escritura para él siempre fue "la forma de exteriorizar las inquietudes que uno lleva dentro".

Y que es feliz, pero no únicamente por el éxito de sus novelas, ya que "podría soportar" los fracasos, que "también enseñan", sino por el "equilibrio sentimental y familiar" desde hace muchos años con su mujer y sus cuatro hijos, afirma.

Falcones añade que la "tremenda" crisis económica "se nota desgraciadamente" en la literatura "como en cualquier ámbito de la vida".

Eligió como protagonistas para "La reina descalza" a una gitana andaluza y a una exesclava cubana porque la "sensualidad" femenina era la mejor manera de aproximarse a la música en el siglo XVIII y a "comunidades injustamente tratadas" durante el despotismo ilustrado, los temas que quería tratar.

En la misma emisión del programa "Entre comillas", el escritor y cineasta Emilio Ruiz Barrachina ha comentado "La venta del paraíso", su recién estrenada película en la que adapta como director una novela también suya.

Barrachina considera que para adaptar un libro a la pantalla "hacer el guion es como cortarle un brazo a un hijo", porque no se puede "cometer el error de meterlo todo en la película", ya que "tiene que ser cine, te tienes que olvidar de la novela".

Del elenco del filme, el cineasta madrileño resalta el papel de travesti interpretado por el actor Juanjo Puigcorbé, y que es la última intervención cinematográfica de Mariví Bilbao, fallecida este año.

"La venta del paraíso" se estrenó antes en Francia que en España, explica Barrachina, contento de la acogida del público en el país galo las primeras semanas, mientras lamenta el cierre de tantas salas en España y culpa de la crisis del cine español a su politización y a que "la parte industrial ha vencido a la parte cultural".

Mostrar comentarios