Fesser concluye en Perú el rodaje del cortometraje "Luces para aprender"

  • El cineasta español Javier Fesser concluyó en Perú el rodaje de un cortometraje para el proyecto de la OEI "Luces para aprender" con el que se pretende ayudar a entender qué significa llevar internet a escuelas en las que los niños todavía estudian a la luz de las velas.

Carmen Jiménez

Lima, 17 dic.- El cineasta español Javier Fesser concluyó en Perú el rodaje de un cortometraje para el proyecto de la OEI "Luces para aprender" con el que se pretende ayudar a entender qué significa llevar internet a escuelas en las que los niños todavía estudian a la luz de las velas.

En una entrevista con Efe, Fesser afirmó que apoya este proyecto de la Organización de Estados Iberoamericanos para la educación, la ciencia, y la cultura (OEI) para que, cuanto antes, sea una realidad que millones de niños accedan a internet y a una educación que les "va a eliminar las desventajas".

Con el proyecto "Luces para Aprender", puesto en marcha en 2011, se pretende llevar electricidad e internet a más de 66.000 escuelas de Iberoamérica, situadas en zonas rurales y de difícil acceso.

Fesser, director de "Camino" ganadora de seis premios Goya en 2009, dijo que rodaron durante 15 días en las comunidades de Ingatambo y de Vista Alegre, en la provincia de San Pablo, en Cajamarca, una de las regiones de mas bajo desarrollo educativo de Perú, y que ayer concluyeron el rodaje en Lima.

El cineasta madrileño explicó que se trata de un "cortometraje de ficción", un "pequeño cuento totalmente basado en una realidad" contado por una niña de 8 años, con "su inocencia e ingenuidad", e interpretado por los maestros, los niños y sus familiares de Vista Alegre e Ingatambo.

Los protagonistas son Anny, Alidel y Gisela, tres niños de entre 6 y 8 años de edad, uno de los cuales tiene que ordeñar las vacas cuando se levanta y luego caminar tres horas para ir a la escuela.

Para Fesser, el proyecto "Luces para aprender" no solo modifica la vida del niño que va a la escuela y tiene acceso a internet, sino de la comunidad entera, al convertirse en el "router, en la computadora de la familia".

Del mismo modo, destacó que con este cortometraje "el mundo va a tener acceso a estos niños" que cuentan una historia de vida diferente.

A juicio del director, ahora queda una labor de montaje "bonita pero laboriosa" que espera que concluya el próximo mes de abril ya que, aunque se trabajó con un guión, en el montaje "va a tomar su personalidad y su forma".

Para este proyecto, Fesser y su equipo siguieron una técnica que hizo en Senegal con "Binta y la gran idea", nominada al Oscar al mejor corto de ficción en 2007, por lo que la primera semana estuvieron como "esponjas" escuchando, viviendo y conociendo, mientras en los últimos días escribieron el guión.

Durante el rodaje también se capturaron muchos momentos que se colocaron delante de la cámara "que no estaban previstos ni escritos" pero que tienen relación con lo que se está contando, apuntó.

Como cineasta, afirmó que fue un aprendizaje salir a la calle con una cámara, un trípode y un micrófono y pensar en "armar una secuencia sien tener quién la va a interpretar", solo parar a la primera señora que pasara y si no tenía mucha prisa, sentarla frente al objetivo.

Fesser también destacó la generosidad de los niños y su colaboración ilimitada y afirmó que, más allá del rodaje, fue "una experiencia personal que no tiene precio".

Además, Fesser se lleva la sensación de haber conocido a gente con un sentido común aplastante que "no ha necesitado ir a la escuela para entender la situación de su comunidad" y que entiende que el "agua se bebe y hará falta toda la vida y que el oro no se come, y el agua acabará siendo el oro dentro de poco tiempo".

El cineasta español reveló que volverá a rodar en Perú porque hay algo que "le atrae muchísimo", que cree que es "la gente", y que su próxima película en la que está trabajando incluye Perú.

Fesser espera estrenar en noviembre de 2014 una cinta de animación por ordenador de Mortadelo y Filemón en la que lleva trabajando tres años.

"Es una producción muy compleja que lleva mucho tiempo, ahora mismo hay 120 artistas trabajando y es una historia en la que estoy especialmente emocionado", concluyó.

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