Francisco Cano dice que seguirá trabajando hasta que el "gran jefe" quiera

Pamplona.- El fotógrafo alicantino Francisco Cano "Canito", quien ha presentado hoy en Pamplona su libro "Mitos", ha asegurado que, a sus 97 años, se mantiene activo y seguirá trabajando hasta que quiera "el gran jefe", al que todos los días le pide "un poco más de cuerda".

Cano, acompañado de la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Pamplona, Paz Prieto, y el editor José Romeu, ha afirmado, en una rueda de prensa que siente "un gran orgullo de haber hecho esta gran obra de arte", en alusión a un libro que recoge instantáneas tomadas durante sus más de 60 años de trabajo, muchas de ellas en las fiestas de San Fermín.

La obra muestra a personajes como Ernest Hemingway, Orson Welles, Ava Gardner o Charlton Heston, tomadas durante los sanfermines de décadas pasadas, pero es también un reflejo de la historia social de la España de la posguerra.

Artistas, directores de cine, cantantes, bailaoras y toreros, su gran pasión y vocación, aparecen en un libro que recoge sólo una pequeña parte de los más de diez millones de fotografías y negativos que Cano ha ido acumulando desde los años cuarenta.

En el libro se puede ver, por ejemplo, al doctor Fleming en una capea con un sombrero cordobés, a una sonriente Lina Morgan vestida de corto en un festival taurino y a Ava Gardner bailando flamenco.

Otras instantáneas muestran a Ernest Hemingway bebiendo de una petaca que le ofrece en el callejón Antonio Ordóñez; a Orson Welles disfrutando de una paella; a Gary Cooper en una fiesta taurina, o a la emperatriz Soraya, a José Ortega y Gasset, a Grace Kelly y Rainiero de Mónaco, Carmen Sevilla, Lola Flores o Sofía Loren.

Pero fueron unas pocas instantáneas las que le hicieron mundialmente famoso el 28 de agosto de 1947, día de la muerte de Manolete en la plaza de Linares (Jaén), al ser el único reportero gráfico que hizo fotografías de esa tragedia.

Cano, que desde 1945 no ha faltado a su cita con los sanfermines, fue profesor de natación, boxeador, novillero aficionado y fotógrafo y a sus 97 años recordaba hoy, bromeando, momentos vividos en las fiestas de Pamplona, como sus borracheras con Hemingway en Casa Marceliano o los días en que Ava Gardner le hacía volver a casa "lleno de carmín".

Aunque sus grandes pasiones, ha subrayado Cano, las sigue teniendo claras, ya que, si volviera a nacer, intentaría ser torero profesional y, de nuevo, fotógrafo, una profesión que no le ha hecho rico. "Dinero no tengo ni un duro", aunque "amigos, todos".