Juli y Manzanares salen a hombros en Huelva pese a la ausencia de toros

  • Los toreros Julián López "El Juli" y José María Manzanares saldaron hoy su mano a mano en Huelva con dos y tres orejas, respectivamente, y la correspondiente salida a hombros, a pesar de la ausencia de toros propicios en cuanto a presencia y juego.

Huelva, 3 ago.- Los toreros Julián López "El Juli" y José María Manzanares saldaron hoy su mano a mano en Huelva con dos y tres orejas, respectivamente, y la correspondiente salida a hombros, a pesar de la ausencia de toros propicios en cuanto a presencia y juego.

FICHA DEL FESTEJO.- Toros de Núñez del Cuvillo, el tercero como sobrero, muy pobres de presentación, mansos, "rajados" y deslucidos. El sexto tuvo más movilidad.

Julián López "El Juli": pinchazo y estocada (oreja); estocada contraria (ovación); y estocada (oreja).

José María Manzanares: media al recibir y descabello (ovación); estocada (oreja); y pinchazo y estocada al recibir (dos orejas).

Manzanares y toda su cuadrilla lucieron brazaletes negros en señal de luto por el fallecimiento de la mujer de "Limo", el chófer de su cuadrilla.

La plaza tuvo tres cuartos de entrada en tarde de calor.

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NI RIVALIDAD NI TOROS

"El Juli" destacó en un quite por chicuelinas a su primero, al que sacó dos buenas series en el toreo en redondo y otras tantas al natural, para acabar pegándose un arrimón con el animal ya totalmente desfondado.

Al tercero bis lo recibió "El Juli" con larga cambiada en el tercio, y con la muleta, ante un animal muy apagado, le robó pases sobre ambas manos dentro de un conjunto sin brillantez.

Con el quinto, último de su lote, volvió a brillar "El Juli" con el capote en un quite por tafalleras. Inició su quehacer de muleta por alto para seguir sobre ambas manos ante un toro "rajado" y deslucido.

Manzanares tan sólo pudo pegar en su primer turno dos buenas series a derechas a un toro que se fue "rajando" poco a poco hasta negarse.

El cuarto, un animal protestado por su escasísima presencia, se lució Manzanares en los estatuarios con los que inició una labor en la que surgieron también derechazos técnicamente buenos pero sin emoción.

El que cerró plaza tuvo más movilidad y el alicantino se lució sobre ambas manos en series de buena factura para concluir con unos bellos ayudados por alto. Cortó las dos orejas.

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