El 8 de diciembre de 1980 Annie Leibovitz acudió al domicilio de John Lennon y Yoko Ono para realizar una sesión de fotos. De ella tenía que salir una portada para Rolling Stone, basada en la cubierta que la entonces fotógrafa jefe de la revista había realizado para el nuevo álbum del músico, "Double fantasy".
Ninguno de ellos sabía que serían las últimas imágenes de Lennon en vida. Horas después, el ex Beatle moría tiroteado por Mark Chapman.
De entre todas las fotos que Leibovitz sacó aquel día, Rolling Stone seleccionó una en la que Lennon aparece totalmente desnudo, abrazado a su esposa. Esa imagen ilustró el número publicado el 22 de enero de 1981, sin ningún titular sobre ella. Esa cubierta fue designada en 2005 como Mejor Portada de la Historia por la Asociación de Editores de Revistas Americanas.
Cuenta Leibovitz que, instantes después de sacar la foto, Lennon le dijo que había captado exactamente la naturaleza de su relación con Yoko Ono y le hizo prometer que sería ésa la que usara como portada de la revista. No llegó a verla impresa.
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