Los premios Goya vuelven con feminismo, glamur y... ¿política?

  • Las mujeres son las grandes artífices y protagonistas de las películas favoritas en la 30ª edición de los premios Goya, que la Academia española entrega este sábado en una ceremonia con retorno del glamur y, tal vez, de la política.

Un poético drama de pasiones irrefrenables, "La novia", hermosa adaptación a la gran pantalla de la tragedia "Bodas de sangre" de Federico García Lorca, es con 12 nominaciones la gran favorita de la gala, que se celebrará en el Madrid Marriott Auditorium.

Su realizadora, la joven cineasta española Paula Ortiz, que firma con éste su segundo largometraje, y su protagonista Inmma Cuesta parten en cabeza para los Goyas de mejor dirección y mejor actriz por esta historia de rebelión femenina llevada a sus más trágicas consecuencias.

"Es intensa, es extrema, una apuesta muy fuerte", explicaba Ortiz en su presentación en el festival de San Sebastián.

El dramatismo de los paisajes, la belleza de la fotografía, la minuciosa elección de la música flamenca, los poéticos diálogos y la fuerza de unos personajes desgarrados: todo en esta película rezuma una pasión ajena a los convencionalismos.

"Me he entregado de una manera bastante bestia, sobrehumana" al papel, explicaba Cuesta. "De esa manera tan salvaje no había enfrentado ningún personaje", reconocía.

Le pisa los talones, con 9 nominaciones, otra historia sobre una mujer de fuerte carácter, "Nadie quiere la noche", de la consagrada directora española Isabel Coixet, protagonizada por la actriz francesa Juliette Binoche, ambas nominadas.

Ambientada en la fría Groenlandia, está basada en la vida real de Josephine Peary, la determinada esposa de Robert Peary, el norteamericano que a principios del siglo XX dirigió la primera expedición al Polo Norte.

La cinta busca, según Coixet, ser un gélido western en femenino. "Nadie había contado la historia del Polo Norte desde el punto de vista de una mujer", reinvindicó la cineasta española en su presentación en el festival de Berlín.

Ganadora ya de cinco Goyas, considerados los Oscar del cine español, Coixet no suele morderse la lengua durante las ceremonias de entrega. Al recoger el premio al mejor documental en 2012 por "Escuchando al juez Garzón", lamentó que el famoso magistrado hubiese sido condenado a la inhabilitación por la justicia española, en su opinión injustamente.

Las reivindicaciones sociales y políticas son habituales en esta gala, donde el actor Javier Bardem calificó hace dos años de "ministro de incultura" al entonces titular de Cultura José Ignacio Wert. El responsable político fue entonces muy criticado por haber aumentado al 21% los impuestos a los productores culturales, incluido el cine.

Esta es una de las políticas de austeridad que el socialista Pedro Sánchez prometió atajar si logra la difícil tarea de formar gobierno, que le encomendó el martes el rey Felipe VI.

Con el país sumido en una complicada negociación entre partidos enfrentados, está por ver si desde el escenario de los Goya se lanzan comentarios políticos. Actores como Bardem apoyan abiertamente al movimiento social de los 'indignados', mientras el director Fernando León de Aranoa prepara un documental sobre el partido de izquierda radical Podemos.

Nominado como mejor director, León de Aranoa llega a los Goya con la delirante comedia humanitaria "Un día perfecto", una de las cinco candidatas a la mejor película. Completan la lista "A cambio de nada" de Daniel Guzmán y "Truman" del español Cesc Gay -cuarto director nominado-, protagonizada por el argentino Ricardo Darín, que opta al Goya de mejor actor.

El argentino competirá con los españoles Asier Etxeandia ("La novia"), Luis Tosar ("El desconocido") y Pedro Casablanc ("B"), mientras Cuesta y Binoche se medirá con Natalia de Molina ("Techo y comida") y Penélope Cruz ("ma ma").

Cruz, que con esta cinta volvió al cine español tras seis años prácticamente ausente, será una de las más esperadas en la alfombra roja, donde diseñadores de ropa y joyas desplegarán sus trabajos más glamurosos sin pudor ahora que el país recobra los colores tras años de dura crisis económica.

La exitosa película argentina "El clan" parece la favorita para alzarse con el Goya a la mejor cinta iberoamericana, aunque enfrentará la dura competencia de la peruana "Magallanes", la cubana "Vestido de novia" y la chilena "La Once".

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