Mariah Carey ha culpado de su ruinosa actuación de Año Nuevo en Times Square al sabotaje de unos ejecutivos que querían audiencia a toda costa. La diva salió disparada del escenario después de que los problemas técnicos la dejaron completamente en evidencia.
Antes de la pesadilla, Mariah advirtió repetidamente a los productores y directores de escena de que sus auriculares ocultos que transmiten el sonido de la audiencia- no funcionaban, según el DailyMail.
"Le dijeron que sus auriculares estaban en una frecuencia diferente y que se conectarían una vez que ella estaba en el escenario". Eso nunca se produjo.
Harta de las circunstancias, la diva del pop dejó de fingir cantar y puso una mano en su cadera mientras el playback continuaba sin ella. Viendo el desastre le dijo a sus fans que al menos intentaría hacer deporte encima del escenario. "Estas mierdas pasan", dejó claro la diva.
Carey ya se limitaba en el escenario a levantar la pierna y sonreír. No es la primera vez que los gallos acompañan a una gran cantante.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios