Martin Amis destaca que "es asqueroso escribir sobre relaciones sexuales autobiográficas"

  • Barcelona.- El británico Martin Amis ha considerado hoy durante la presentación de su novela "La viuda embarazada" que no se puede escribir sobre relaciones sexuales de manera autobiográfica, porque es "asqueroso", pero ha reconocido que en su obra las hay, porque contribuyen a desarrollar la trama.

Martin Amis destaca que "es asqueroso escribir sobre relaciones sexuales autobiográficas"
Martin Amis destaca que "es asqueroso escribir sobre relaciones sexuales autobiográficas"

Barcelona.- El británico Martin Amis ha considerado hoy durante la presentación de su novela "La viuda embarazada" que no se puede escribir sobre relaciones sexuales de manera autobiográfica, porque es "asqueroso", pero ha reconocido que en su obra las hay, porque contribuyen a desarrollar la trama.

En una concurrida rueda de prensa, el autor inglés, junto a los editores de Anagrama y Empúries, ha hablado este mediodía en Barcelona de su último título, en el que narra las peripecias de media docena de jóvenes ingleses -chicos y chicas- en un castillo italiano, en el caluroso verano de 1970, en plena revolución sexual.

Aunque empezó la historia incluyendo hechos relacionados con su vida y con la de su hermana, pronto abandonó esta senda y decidió seguir otro camino, aunque no ha escondido que de joven también pasó unas vacaciones con unos amigos, en este caso en Francia.

En su intervención, ha hecho una disquisición sobre la inclusión de escenas de carácter sexual en las novelas, aseverando que en cualquier relato tiene que haber siempre una flecha conductora, pero con las escenas de este tipo "todo se detiene y la sensación es de que no se va a ninguna parte".

A pesar de ello, en su nueva historia hay unas cuantas escenas sexuales, a una de las cuales dedica incluso tres páginas completas. "Si lo hago -ha proseguido- es porque en la novela está justificado, porque lo que describo permite que haya un desarrollo de la trama".

Además, entiende que estas partes del texto fueron muy fáciles de escribir y tampoco son difíciles de leer, porque están muy relacionadas con el argumento. "En un contexto correcto puedes escribir de sexo de manera pornográfica, es decir describiendo el acto sexual eliminando de él cualquier sentimiento o emoción, que creo es en lo que se ha convertido el sexo en el siglo XXI. Algo lamentable", ha apostillado.

Preguntado sobre qué efectos cree que tuvo la revolución sexual en los sesenta y en los setenta, especialmente en las mujeres, Martin Amis ha sostenido que en función de la manera de ser de cada una de ellas fue diferente y ha comentado que en su libro describe tanto a una que fue demasiado lejos, a otra que no participó de ello y a otra que se mantuvo en medio, lo que ha calificado como lo "más sensato".

En cuánto al momento actual, ha mantenido que la revolución feminista todavía no ha acabado ni se detiene, aunque las cosas no se hacen de forma rápida.

"Antes el acoso sexual no existía -ha argumentado- y cuando a una mujer le pellizcaban en una oficina se decía que 'así es la vida'. Ahora, al menos, tenemos claros cuáles son los parámetros del debate, pero cualquier sociedad no se cambia sólo con chasquear los dedos".

A punto de iniciar una nueva vida en Nueva York, donde se trasladará en julio por cuestiones familiares -"voy por la cadera de mi suegra o por el codo de mi suegro"- ha indicado que no le desagrada la idea de que a partir de ahora se le considere un novelista entre Inglaterra y Estados Unidos, un país en el que ya residió entre los nueve y los diez años.

Sobre realidad y ficción, hoy ha señalado que para él la ficción siempre tiene muy poca similitud con la realidad, mientras que entiende que "la vida real tiene una cualidad muy extraña, ya que es materia inerte, muerta, y es la novela la que le da vida a través de la pauta, la forma y la unidad".

Aunque hoy haya presentado "La viuda embarazada", Amis ha avanzado que tiene ya una nueva novela, titulada "Lionel Asbo", en la que narra la vida de un joven delincuente que un día gana 130 millones de libras en la lotería inglesa.

Se trata de una sátira de la Inglaterra actual, un país que hoy ha descrito como "una vieja borracha que desea en lo más profundo de su ser reconquistar su pasado glorioso", y que, seguramente, no será recibida con muchos aplausos por sus compatriotas.

En este sentido, ha bromeado afirmando que la decisión de partir a Nueva York la tomó mucho antes de iniciar esta obra.

Después quiere tratar en otra novela sobre las similitudes que hay entre las personas y los países en los que residen.

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