Muestra "El Caracazo" recuerda el quiebre del sistema político venezolano

Montevideo, 28 feb.- La exposición "El Caracazo", que hoy abrió en el Centro Cultural Simón Bolívar de Montevideo, recuerda con una selección de fotografías el punto de quiebre que supuso esa revuelta popular y su posterior represión para el sistema político venezolano.

A lo largo del mes de marzo, los uruguayos podrán acudir a ver casi una veintena de fotografías tomadas el 27 y 28 febrero de 1989 por los reporteros Francisco Solórzano y Tom Grillo, que ilustran los "luctuosos y dolorosos" hechos que afectaron a Caracas en esas fechas y que marcaron un paso importante en la historia de Venezuela, explicó a Efe Luis Alejandro Sauce, ministro consejero de la embajada bolivariana en Uruguay.

Las fotografías, en blanco y negro, recogen las imágenes de ese día, con episodios de saqueos, presencia de militares y tanques en las calles, heridos en los enfrentamientos y víctimas de la represión de aquel día, cuya cifra aún no se conoce a ciencia cierta.

"Venezuela estaba en crisis. El presidente Carlos Andrés Pérez tomó posesión y comenzó a tomar medidas económicas ancladas en los dictados del Fondo Monetario y el Banco Mundial, y eso generó un estallido social y protestas, que se convirtieron en una rebelión popular", explicó Sauce.

Para el diplomático, esas protestas, y la dura represión ordenada por el Gobierno, fueron el inicio del proceso que llevó tres años después al intento de golpe de Estado desarrollado por Hugo Chávez y casi diez años después a su triunfo en las urnas para iniciar la llamada "revolución bolivariana".

"Con el Caracazo se rompen el sistema bipartidista tradicional que entrecomillas garantizaba estabilidad a la población. Es la primera expresión de un cambio de paradigma de una democracia representativa, a la que no interesaban los deseos del pueblo, a una democracia participativa, con el pueblo en la calle", dijo Sauce.

Para el funcionario, lo más destacado de la muestras es que presenta al "pueblo que entonces salió a la calle" para hacer valer sus decisiones y que "desde entonces no ha regresado", creando una "democracia participativa" y un debate "fuera de las imposiciones económicas del sistema internacional que sin duda oprime a los pueblos".