"Patios de Lucía", la noche blanca paralela del Alcázar Viejo de Córdoba

Juan Velasco.

Córdoba, 21 jun.- La imagen de un joven Paco de Lucía, en 1968, antes de ganar el V Concurso Nacional de Arte Flamenco, andando por el Alcázar Viejo de Córdoba, o hace tres años, antes de un concierto en La Axerquía, tomando un aperitivo en Puerta Sevilla, pueden ser reales o imaginadas, pero no son descabelladas.

Estos días, los vecinos más antiguos del Alcázar Viejo, uno de los barrios más imponentes de Córdoba, con algunos de los patios más bellos, en pleno casco antiguo, y patrimonio de la humanidad, recuerdan la huella del guitarrista de Algeciras en su barrio y, por ende, en toda la ciudad.

Se trata de la cuarta edición de "El Alcázar Viejo a la luz de las velas", que este año ha tomado el nombre de "Patios de Lucía", como homenaje al malogrado maestro, una persona que tocó mucho en Córdoba y al que uno de los barrios "con más solera" rinde tributo aprovechando la celebración de "La Noche Blanca del Flamenco".

No cabe duda de que, en todos los conciertos que se van a celebrar esta noche en Córdoba, habrá variados homenajes a Paco de Lucía, pero el único que ha optado por hacerlo a cara descubierta es el de esta particular noche blanca paralela.

Así lo indica a Efe el presidente de la Asociación de Vecinos del Alcázar Viejo, Javier Álvarez de Sotomayor, que lleva ya dos días pendiente de que todo suene como debe sonar y de que cada una de las 3.000 velas que iluminan el barrio esté prendida.

"Todos los vecinos, hosteleros y flamencos se vuelcan y suman para organizar esta noche blanca paralela", explica Álvarez, quien pone especial énfasis en destacar la labor de la peña flamenca El Almíbar, encargada del apartado musical.

De "Patios de Lucía", que se celebra esta noche, se ha encargado el bailaor cordobés Daniel Navarro, que ha aglutinado a un nutrido grupo de jóvenes artistas locales de cante, toque y baile, todos amigos de El Almíbar.

No sólo la música suena a Paco de Lucía, también las paredes, puesto que un imponente grafiti de 10 por 3 metros ubicado en el patio de la Asociación de Vecinos y realizado por el artista Otes, rinde homenaje explícito al guitarrista y también a los fundadores de los patios.

Patios que, por otro lado, vuelven a abrirse al público estos tres días, tras haber tenido el mes de mayo más concurrido que se recuerda a nivel de visitantes.

Con el clima jugando a favor, las dos primeras jornadas de esta noche blanca paralela se han cerrado con éxito, a la espera del colofón, que tendrá lugar esta noche, con el espectáculo "Patios de Lucía".

En el barrio, jóvenes y mayores disfrutan al mismo tiempo de la vida que se les insufla desde la Asociación de Vecinos, que hoy dirigen jóvenes de treinta y pocos años y que, desde un primer momento, han optado por la regeneración cultural.

"Es un barrio pueblo, amurallado, con mucha solera y en el que hay preocupación de un vecino por otro vecino. Algo que hoy en día no se da ni en un bloque", especifica Álvarez sobre su barrio, probablemente el más visitado por turistas nacionales e internacionales, que estos días disfrutan además de su particular iluminación.

De hecho, hay más de 3.000 velas colocadas por sus rincones, patios y callejuelas, lo que otorga a un barrio, que ya de por sí tiene un halo misterioso, un plus de intimidad.

Intimidad que sólo rompe la música, en un barrio que siempre ha sido muy flamenco, una identidad que los más jóvenes están preservando y potenciando.

Por eso, Álvarez sonríe ante la imagen de un joven Paco de Lucía paseando por el barrio y dice, con total seguridad: "No me cabe duda de que Paco de Lucía conocía el Alcázar Viejo, porque era un barrio muy flamenco". EFE

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