Perera y Talavante cortan una oreja cada uno en una entretenida corrida

Málaga, 20 ago.- Los diestros extremeños Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante han paseado un trofeo cada uno en la corrida celebrada esta tarde en la plaza de toros de La Malagueta, en la que los aficionados han disfrutado de excelentes faenas de muleta.

Se han lidiado seis toros de Victoriano del Río, correctos de presentación, juntos de fuerza, descastados y manejables en general.

El Juli: estocada trasera y caída (silencio) y pinchazo, media y tres descabellos (ovación tras aviso)

Miguel Ángel Perera: estocada baja (oreja) y estocada (ovación).

Alejandro Talavante: estocada trasera y cinco descabellos (vuelta al ruedo tras aviso) y pinchazo y estocada (oreja).

Ha saludado en el sexto Juan José Trujillo, de la cuadrilla de Talavante, para quien ha sonado la música.

La plaza de La Malagueta ha registrado un casi lleno en tarde calurosa en la cuarta de abono.

El Juli, Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante han protagonizado esta tarde una entretenida tarde de toros en La Malagueta, en la que los dos últimos han paseado sendos trofeos, aunque su otro compañero también pudo hacerlo de haber estado más certero con los aceros en el segundo de su lote. La corrida de Victoriano del Río, si bien no ha destacado por su casta y ha estado justa de fuerzas, al menos se ha dejado en la muleta de estos diestros.

El primero de la tarde ha brillado a gran nivel en los primeros tercios, embistiendo muy templado al capote de El Juli, que se ha estirado a la verónica, ha dejado dos bellas medias y ha cerrado cerró con la revolera.

Ha permitido chicuelinas al paso para acudir al caballo, donde se le ha cuidado mucho; pero ya con la muleta ha acusado una gran falta de fuerza que le hacía llegar muy rebrincado. El diestro ha querido administrarle, lo ha probado por los dos pitones, y ha decidido apostar por el pitón derecho, ya que en el izquierdo rehusaba a embestir. Duró poco, y con buen criterio ha optado por abreviar.

No tenía clase de salida su segundo, aunque en este caso El Juli le ha sacado el máximo partido en una faena breve pero intensa. Ha apostado decididamente por sacarle partido, con series de derechazos largos, y naturales profundos.

Ha estado variado con los remates de las tandas, centrando sus esfuerzos en taparle la salida para que no huyera a la querencia. Esta circunstancia ha deslucido la recta final de una labor mal rubricada con la espada.

Aún también muy justo de fuerzas, Miguel Ángel Perera ha cuidado mucho al primero de su lote, al que apenas se le ha picado. El diestro ha apostado decididamente por este astado, plantando las zapatillas en el tercio para pasárselo con emoción por los dos pitones.

El toro galopaba, desplazándose largo y templado por el pitón derecho en una faena que ha crecido en intensidad al salir a los medios, con series ligadas en redondo, cada vez más largas. Intensidad que ha bajado considerablemente al tomar la izquierda, pese a lo que se le ha solicitado con fuerza una oreja concedida por la presidencia a pesar de que la espada caía desprendida.

Ha repetido planteamiento en el quinto, apostando por él en la muleta. No obstante, este toro no tenía la misma continuidad en sus embestidas, y el conjunto tampoco ha podido tener un hilo argumental. De forma algo intermitente su labor tuvo momentos interesantes. Se le ha pedido nuevamente una oreja, esta vez de forma minoritaria y no concedida, tras estar certero al matar.

Talavante se ha encontrado en primer lugar a un toro de Victoriano del Río que ha salido sin celo, aunque ha llegado con viveza a la muleta. Comenzaba estético por bajo para seguir vertical en una misma serie cerrada con una trincherillas.

Ha sido un bonito inicio de faena con ajuste en la que siempre se lo ha pasado cerca de los muslos, quedándose muy quieto, y alargando el poco recorrido de un burel que terminó entregado. Ha sido una labor fundamentada en el pitón derecho, aunque por el izquierdo también ha habido pases interesantes, y que se cerraba con bernardinas y un cambio de manos muy bello.

Ha faltado la rúbrica de la espada para haber obtenido un triunfo importante.

También ha podido abrir la puerta grande en el último, cerrando una tarde en la que ha brillado a gran nivel. Se ha lucido en banderillas Juan José Trujillo, que ha hecho incluso sonar la música, y Talavante ha desarrollado una labor iniciada con estatuarios, con tandas de gran pureza y profundidad por los dos pitones.

No ha sido una faena de cara a la galería, pero el público ha sabido captar la esencia del toreo del extremeño. Ha precisado un pinchazo antes de lograr una estocada, y esta vez sí que ha paseado una oreja en una clamorosa vuelta al ruedo.