Pilar Urbano espera del Rey "un acto de autoridad" y que exista una sanción "familiar" a Urdangarin

  • La periodista Pilar Urbano habló ayer en la presentación de su libro 'El precio de la corona' pareció que "todo eso resulta poco creíble y, por tanto, decepcionante". En su opinión, para realizar esta declaración "era preferible que se hubiese abstenido de contestar"
Pilar Urbano espera del Rey "un acto de autoridad" y que exista una sanción "familiar" a Urdangarin
Pilar Urbano espera del Rey "un acto de autoridad" y que exista una sanción "familiar" a Urdangarin
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La periodista Pilar Urbano afirmó ayer que espera del Rey"un acto de autoridad dentro de su casa", que tiene que "traducirse en un alejamiento, exclusión o sanción de cualquier tipo" al duque de Palma, Iñaki Urdangarin, "si ha delinquido o arrojado sombras y sospechas no ejemplares, y escandalizantes", sobre la figura de la Casa Real y la Corona.

"Precisamente porque el Rey es inviolable", su figura y la Corona "tiene que ser inmaculada, intachable", advirtió, para desear que se imponga "el prestigio regio que ha tenido siempre Juan Carlos".

Con motivo de la presentación de su libro El precio del trono en Zaragoza, Urbano señaló que le han "preocupado varias cosas" de la declaración de Iñaki Urdangarin este fin de semana en los juzgados de Palma en calidad de imputado, donde ha declarado para explicar su papel dentro del Instituto Noós.

En este sentido, Urbano dijo sentirse "decepcionada" por la declaración de Urdangarin ya que "es confuso y no es creíble que él desconozca las actividades de una sociedad en la que tiene el 50% y Diego Torres el otro 50%".

Asimismo, "no es creíble que ignore los e-mails y la actividad de su secretaria particular, los correos en los que está contratando a fantasmas y no es creíble que él no conozca las actividades empresariales de Noós, que él preside y no como un florero" sino que era "una presidencia ejecutiva".

Por ello, Urbano pareció que "todo eso resulta poco creíble y, por tanto, decepcionante". En su opinión, para realizar esta declaración "era preferible que se hubiese abstenido de contestar".

En todo caso, "lo único que ha dejado muy claro es que la Infanta (Cristina) no sabía nada" y ha cumplido con "el gran encargo que tenía de su Majestad el Rey", que era decir que el Rey le ordenó "que abandonase la actividad en el año 2006 y queda claro que no la abandonó", ha apuntado Urbano.

Así, "el fiscal observa irregularidades en las actividades empresariales o mercantiles del señor Urdangarin desde el año 2003 y hasta 2008 y ahí puede entrar en juego la prescripción", si bien "aunque haya prescrito parece que el delito existió". "Mancha la institución"

"Yo no soy quién para decir si hubo o no dolo, o si hubo daño de otros hacía el, pero (el delito) existió y en ese caso esto empaña y mancha una institución que está por encima del señor Urdangarin", ha remarcado Pilar Urbano, al señalar que, por ello, "tiene que haber una sanción, si no la hay penal, tiene que haberla familiar" dado que "social ya la está habiendo".

En este sentido, ha observado que "hay una especie de pandemia tóxica con este asunto" porque "ni con el 23F se habló tanto y todo el mundo" y el caso "ha invadido la red, las casas, las tertulias y las conversaciones. No se habla de otra cosa".

No obstante, puede tener un final positivo porque "la monarquía depende de quien la encarna, que es el Rey, y del Rey se espera, yo espero, un acto de autoridad dentro de su casa que tiene que traducirse en un alejamiento, exclusión o sanción de cualquier tipo de una persona si ha delinquido o si ha arrojado sombras y sospechas no ejemplares, y algo más, escandalizantes, sobre una figura, la Casa Real y la Corona" que debe ser "inmaculada, intachable".

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