Ulises Merida prefiere vestidos con patrones continuos

  • Con patrones continuos y siluetas rectilíneas, Ulises Merida ha presentado una colección, en la que el negro, arropado con sutiles pinceladas moradas y beiges, ha sido el protagonista absoluto. "He modelado la colección sobre el cuerpo de la mujer, sin patrón alguno", ha contado hoy a EFEstilo.

Madrid, 15 feb.- Con patrones continuos y siluetas rectilíneas, Ulises Merida ha presentado una colección, en la que el negro, arropado con sutiles pinceladas moradas y beiges, ha sido el protagonista absoluto. "He modelado la colección sobre el cuerpo de la mujer, sin patrón alguno", ha contado hoy a EFEstilo.

En un luminoso salón del rehabilitado Centro Cultural Conde Duque de Madrid, Merida ha mostrado veinticuatro propuestas para vestir a la mujer el próximo otoño-invierno 2013-2014, entre las que se han visto vestidos con hermosos pliegues y cortes asimétricos, todo ellos muy trabajados por detrás.

Unos se presentaron con vistosas lazadas en dos colores, otros con vertiginosos y atractivos escotes que se encargaba de desnudar la espalda femenina y algunos adornados con atractivas cintas. "Son prendas de vestir, para lucirse", ha puntualizado el diseñador en la pasarela del MFShow Madrid.

Bajo la batuta de la sencillez, Merida ha creado piezas muy tranquilas de gran belleza, entre ellas un vestido largo a modo de túnica realzado con un cinturón troquelado, que más bien parecía una obra de arte tallada en bronce.

A lo largo del desfile se han visto pantalones pitillo con cinturas elevadas y adornadas con dulces pliegues conjuntados con etéreas blusas y sobrios abrigos-vestidos.

"La mayoría de mis propuestas no tienen patrón, he querido que la propia mujer finalice la prenda", ha dicho el costurero, quien ha arrancado el desfile con una capa negra de lana rústica, que imitaba los tejidos a mano.

Lanas, cueros napados, terciopelos martelé, punto de cota de malla, gazar, rafia con efecto metalizado y pelo de cabra de Mongolia han sido algunos de los tejidos presentes en la colección. "Gracias a la textura de los tejidos he podido coser una colección de color negra con apuntes nude y morado", ha dicho.

A partir de unos corsés beige con las ballenas y cierto aire "vintage", el modisto ha desarrollado una serie de vestidos largos muy ligeros, que respiran elegancia.

Aunque es su primera colección y su primer desfile, el diseñador cuenta con una larga trayectoria en el sector textil. Ha trabajado para Jesús del Pozo, Agatha Ruiz de la Prada y Roberto Torreta.

"De todos he aprendido, pero estoy un momento vital que me apetece contar mi propia historia", ha comentado.

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