Barcelona, 18 ene.- La réplica de la "frágil" Nao Victoria con la que 18 hombres capitaneados por Elcano dieron la primera vuelta al mundo entre 1519 y 1522, que tanto ayuda a comprender aquella gesta, equiparable para algunos a la llegada del hombre a la Luna, está estos días en el puerto de Barcelona y puede visitarse.
Se trata de la reconstrucción de esta mítica embarcación hecha en 1992 con motivo de la Exposición Universal de Sevilla, que por primera vez ha atracado en el Port Vell de la capital catalana y en torno a la cual se llevarán a cabo una serie de actividades divulgativas relacionadas con la historia de la navegación.
La historiadora y directora de relaciones institucionales de la Fundación Nao, entidad propietaria de la embarcación, Guadalupe Fernández Morente, ha señalado hoy que el puerto de Barcelona representa una época, la de las expediciones, y por eso la réplica, que ha visitado ya diecisiete países de los cinco continentes, atraca ahora en la capital catalana.
La réplica, con sus tres palos y veintiséis metros de eslora, mantiene todos los detalles y el funcionamiento original de hace casi quinientos años, y de hecho con esa mismas condiciones logró dar la nueva vuelta al mundo entre 2004-06, y se dejó ver en el pabellón español de la Expo de Aichi de Japón en 2005 y en Shangai, en 2010.
La Nao Victoria original partió en 1519, junto a otras cinco naves, del puerto de Sevilla capitaneada por Hernando de Magallanes, para tres años más tarde, y miles de vicisitudes después, culminar la gesta: dar la primera vuelta al mundo.
En esta circunnavegación, cruzó el Atlántico, bordeó las costas del continente sudamericano, atravesó el ahora conocido como estrecho de Magallanes y surcó el Pacífico hasta alcanzar las islas Filipinas.
En el regreso, y tras la muerte de Magallanes, Juan Sebastián Elcano asumió el mando y desde Timor cruzó el Índico, dobló el cabo de Buena Esperanza y bordeando la costa de África, para llegar de nuevo a España.
De los 243 hombres que salieron Sevilla, sólo 18 lograron completar la aventura, que únicamente se logró repetir 60 años después.
Con llegada de la Nao Victoria a Barcelona se quiere difundir la historia de la navegación, que tiene quizás en esta gesta su hito más importante, tres años a bordo, o, lo que es lo mismo, quince veces la "Barcelona World race".
El comandante naval de Barcelona, José Luis García Velo, que ha visitado la embarcación, ha asegurado que la gesta de Magallanes y Elcano, y de las tripulaciones que les acompañaron, fue más osada que la conquista del espacio. "Ellos no podían llamar y decir 'Houston, tenemos un problema'. Estaban solos", ha explicado.
"Estar en la cubierta de una embarcación igual a la que dio la vuelta al mundo en durísimas condiciones, pensar en la vida a bordo, resulta emocionante", ha dicho el director del Museo Marítimo de Barcelona, Roger Marcet.
En esta línea divulgativa, la fundación Nao Victoria y el Museo Marítimo de Barcelona ofrecen visitas guiadas a la réplica, así como al pailebote Santa Eulalia y al propio museo, además de actividades para escolares, talleres y salidas a navegar, entre otras.
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