El área, ubicada en un área verde entre la avenida Meridiana, la Via Favència y la calle Cooperació, se ha diseñado específicamente para el disfrute de los canes y sus propietarios.
Su estrena se ha celebrado con una jornada de talleres y actividades para promover, como se pretende con el parque mismo, la tenencia responsable de mascotas, la convivencia entre humanos y perros, y los derechos de los animales.
La teniente de alcalde de Ecología, Janet Sanz, ha destacado que "Barcelona quiere ser ciudad amiga de los animales" y ha asegurado que desde el consistorio se trabaja con entidades vecinales y asociaciones animalistas para crear espacios similares en otros puntos de la capital catalana.
EL PARQUE
En un espacio de 2.695 metros cuadrados, se han aislado 700 con una valla --hecha de materiales que eviten herir a los animales-- para evitar que los perros escapen y en el recinto se han colocado papeleras no oxidables, bancos y bebederos.
El pavimento es de arena de diferentes texturas, según la zona, y se ha instalado un sistema de riego para limpiarlo.
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