En una breve declaración, Gentiloni ha acusado al régimen de Bashar al Assad de haber cometido "un crimen de guerra" con el ataque químico del martes en la provincia de Idlib y ha sostenido que "las imágenes de muertos y sufrimiento que hemos visto en los últimos días son imágenes que no podemos aceptar volver a ver".
El primer ministro italiano ha recordado que el uso de armas químicas está prohibido por convenciones internacionales y resoluciones de Naciones Unidas y la respuesta a su empleo no puede ser la "indiferencia". "Quien las usa no puede contar con atenuantes", ha añadido.
Así las cosas, ha subrayado que Italia está convencida de que la única solución al conflicto en Siria pasa por una mesa de negociaciones en la que participen tanto la oposición como el régimen, bajo los auspicios de la ONU y con un papel decisivo y constructivo de Rusia".
Gentiloni ha indicado que ha hablado por teléfono con el presidente francés, François Hollande, y la canciller alemana, Angela Merkel, con quienes ha abordado del "compromiso común de que Europa contribuya en esta dirección a la reanudación de las negociaciones".
En este sentido, se ha mostrado convencido de que el ataque "puntual y limitado" de Estados Unidos "no debe obstaculizar sino acelerar las opciones de una negociación política para una solución duradera". "Este es el único antídoto serio para las amenazas terroristas que aún hay presentes en esta zona", ha remachado.
Por su parte, el ministro de Exteriores italiano, Angelino Alfano, ha señalado que "Italia entiende las razones de la acción militar estadounidense", que ha definido como una "respuesta proporcionada" y una "señal de disuasión" para que el régimen de Al Assad no vuelva a emplear armas químicas.
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