El Gobierno de Aragón apuesta por la mejora de la eficiencia energética en sus edificios

La huella de carbono es un indicador que permite cuantificar las emisiones de gases de efecto invernadero que se producen como consecuencia de una actividad determinada, tal como el funcionamiento de esta organización.

Para ello, se han considerado los alcances combustible (alcance1) y electricidad (alcance 2) y se ha elaborado un Plan de Reducción que contempla mejoras en el ahorro y la eficiencia energética de las actividades desarrolladas en el edificio de San Pedro Nolasco, donde se ubican sus servicios centrales, teniendo en cuenta los años 2011, 2012, 2013 y 2014.

Únicamente a través de la medición de las emisiones asociadas a las actividades que desarrollamos, podemos dar un primer paso para su reducción consciente. El estudio determina que menos del 10 por ciento de las emisiones provienen de la utilización de combustibles (alcance 1), siendo el consumo de electricidad para climatización (alcance 2) responsable de la mayor parte de las emisiones, hasta un 87 por ciento.

El Plan de Reducción contempla la identificación e inclusión de nuevas medidas para la reducción del consumo eléctrico en el departamento en colaboración con la unidad responsable del mantenimiento, y entre las que se puede incluir para su estudio figura la sectorización de la iluminación, la iluminación de bajo consumo, leds, contratación de electricidad renovable, sustitución equipos calefacción y climatización por otros más eficientes, toldos en fachada, y estudio de consumo eléctrico, entre otros.

Además, se emprenderá una campaña de comunicación a los empleados para mejora de los uso del edificio, ha informado el Gobierno de Aragón en una nota de prensa.