Identifican al hombre que apareció calcinado en un coche en el túnel de Teno (Tenerife)

El cuerpo apareció en el asiento trasero del vehículo y no se podía ni determinar el sexo debido a que estaba muy consumido por las llamas. Las investigaciones han permitido concluir que no hubo intervención de otras personas.

El Equipo Territorial de la Guardia Civil de Puerto de la Cruz, así como el Laboratorio de Criminalística de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Santa Cruz de Tenerife fueron los encargados de realizar la inspección ocular del vehículo.

Tras esta primera inspección, que se prolongó hasta casi el amanecer, observaron que dentro del coche había gran cantidad de carbón, así como un trozo de una matrícula, toda vez que no se localizó otros restos de matrículas y estaban arrancadas, hechos tan extraños que podrían suponer inicialmente la escena de un homicidio.

Ya durante las primeras horas de la mañana del sábado se activó al Equipo de Homicidios de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil para que asumieran la dirección de la investigación.

Los mismos que la semana pasada resolvieron el crimen de Valleseco, verificaron tras una examen del vehículo que se había cortado con una radial el número de bastidor para dificultar su identificación a través de la matrícula, descubriendo un fragmento que correspondía con el vehículo cuya placa se obtuvo.

Con Apoyo del Grupo de Investigación de la Agrupación de Tráfico, se logró obtener la identificación de un vehículo que se ajustaba a la combinación parcial de la matrícula encontrada, llegando a obtener los datos del titular, llevando a cabo un estudio del entorno familiar.

Llegados a este punto se pudo localizar y entrevistar a una serie de empleados de una empresa propiedad del presunto fallecido, toda vez que se hacía necesaria su confirmación a través del ADN. Por parte del Equipo de Homicidios se requirió a los empleados para realizar una inspección de dicha empresa, donde esta persona se encontraba residiendo.

Allí llegaron a encontrar anotaciones sobre acciones a ejecutar antes de proceder al suicidio, tales como destrucción del bastidor, destrucción de cámaras de la empresa, donde supuestamente eliminó el bastidor y arrancó a su vez otra placa del motor.

Tras la obtención de estos indicios, además de otros durante todo el sábado, se pudo llegar a la conclusión de que la no intervención de terceros e intentar por parte del finado que no fuera posible su identificación.