Cada vez son más jóvenes las personas que sufren infartos.
A pesar de que existe una mayor comprensión de los factores de riesgo de enfermedades de corazón y la necesidad de cambios de estilo de vida preventivos, los pacientes que padecen el tipo más grave de ataque al corazón se han vuelto más joven y más obesos, según un estudio que será presentado en la 65ª Sesión Científica Anual de la Sociedad de Cardiología.
El nuevo estudio analizó factores de riesgo de enfermedades del corazón entre más de 3.900 pacientes que fueron tratados por infarto de miocardio con elevación del ST o STEMI (el tipo más grave y mortal de un ataque al corazón) en la Clínica Cleveland, Estados Unidos, entre 1995 y 2014.
"Cuando la gente viene para hacerse chequeos de rutina, es muy importante hacer
hincapié en la importancia de reducir los factores de riesgo a través de la disminución de
peso, comer una dieta sana y la práctica de actividad física", apuntan los expertos.Cuándo se produce un infarto
Un ataque al corazón STEMI se produce cuando una de las arterias principales del
corazón se bloquea completamente por placa, deteniendo el flujo de sangre.
La atención médica inmediata puede aumentar las posibilidades de supervivencia, pero STEMI conlleva un alto riesgo de muerte y discapacidad.
Hay muchos factores que son conocidos por elevar el riesgo de ataque cardiaco de una persona. Aunque algunos, como la edad y los antecedentes familiares, están más allá del control del individuo, muchos se pueden reducir a través de opciones de estilo de vida, como hacer más ejercicio, dejar de fumar y adoptar una dieta saludable para el corazón.Investigación en datos
Los investigadores dividieron a los pacientes registrados con STEMI en la Clínica
Cleveland entre 1995 y 2014 en cuatro cuartiles, cada uno representando un lapso de cinco años.
El análisis de los factores de riesgo de línea de base y las condiciones de salud de los pacientes en cada grupo, reveló que la edad media de los pacientes con STEMI se redujo de 64 a 60 años y la prevalencia de la obesidad aumentó del 31 al 40% entre el primer periodo de cinco años y el último lapso de cinco años.
La proporción de pacientes con diabetes aumentó del 24 al 31%, el porcentaje
con presión arterial alta creció del 55 al 77% y la proporción con enfermedad
pulmonar obstructiva crónica pasó del 5 al 12% durante el mismo periodo.
Uno de los hallazgos más sorprendentes, según los autores del estudio, fue el cambio en las tasas de tabaquismo, que aumentó de 28 a 46%, un hallazgo contrario a las tendencias nacionales, que reflejan una disminución general de las tasas de tabaquismo en los últimos 20 años.
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que lainformacion.com restringirá la posibilidad de dejar comentarios