El nuevo ente tiene como competencias definir las estrategias de actuación conjunta en temas relacionados con política académica, investigación y transferencia de conocimiento e impulsar programas de mejora de la calidad, así como gestionar y coordinar los servicios comunes administrativos de investigación, relaciones internacionales, ocupabilidad y emprendeduría.
Mantiene los cuatro decanos --uno por facultad-- y los seis vicedecanos, de los cuatro se encargarán de la política académica de su facultad y los otros dos llevarán a cabo funciones transversales de investigación, internacionalización y empleabilidad; el área tendrá un consejo de dirección y un director, escogido entre los decanos de las cuatro facultades.
El Consell de Govern de la UB también ha aprobado, con 33 votos favorables y una abstención, el cambio de denominación de dos facultades, que quedan pendientes de su publicación en el Dogc: la de Matemáticas se convertirá en la de Matemáticas e Informática, y la de Geología en la de Ciencias de la Tierra.
En el marco de la reforma de estructuras, el rector de la UB, Dídac Ramírez, ha puesto en marcha el expediente para crear la nueva Facultad de Ciencias Humanas y Sociales, que integrará los centros de Bibliotecomanía y Documentación, Filología, Filosofía y Geografía e Historia.
En el ámbito académico, el Consell de Govern ha aprobado la memoria de verificación del máster de Medicina Tradicional China, liderado por la UB y con la participación de la Universitat Pompeu Fabra (UPF), que se pondrá en marcha a partir de septiembre.
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