VEINTIDÓS MUERTOS EN LAS CARRETERAS A UN DÍA PARA ACABAR LA SEMANA SANTA

Un total de 22 personas han perdido la vida en las carreteras españolas desde las 15.00 horas del viernes 7 de abril hasta las 24.00 del domingo 16, en el marco del dispositivo especial de la Dirección General de Tráfico (DGT) con motivo de la Semana Santa, que concluye en la medianoche de este lunes.
Fuentes de la DGT informaron a Servimedia de que en lo que va de dispositivo especial de la Semana Santa se han producido 22 accidentes de tráfico mortales, en los que han fallecido 22 personas y otras 18 han resultado heridas y fueron trasladadas a hospitales.
A falta de que la operación de Tráfico termine este lunes, el día más trágico fue el jueves 13 (seis fallecidos), seguido del domingo 9 (cuatro), los dos sábados (tres), los dos domingos (dos) y el martes, el miércoles y los dos viernes (uno), mientras que el lunes no hubo ningún accidente mortal.
La Semana Santa del año pasado acabó con 41 fallecidos en 28 accidentes mortales, la cifra más alta desde 2012. A ese incremento de la siniestralidad contribuyó principalmente el accidente de un autocar en la AP-7 a la altura del término municipal de Freginals (Tarragona), en el que murieron 13 personas.
La DGT espera que entre las 15.00 horas del viernes 7 y las 24.00 horas de este lunes se produzcan 14,8 millones de desplazamientos de largo recorrido (al menos 50 kilómetros) en las carreteras españolas, con lo que sería la Semana Santa con más viajes desde 2008, cuando se registraron 15,2 millones de trayectos.
Después se encadenaron cinco años consecutivos de descenso, según datos de la DGT recogidos por Servimedia: 14,5 millones en 2009; 14,4 en 2010; 14,2 en 2011; 12,7 en 2012, y 11,9 en 2013.
Tras los años más duros de la crisis económica comenzaron a repuntar los trayectos largos en carretera durante la Semana Santa, con 12,9 millones en 2014; 13,8 millones en 2015, y 14,1 millones en 2016, a lo que hay que añadir los 14,8 millones previstos para este año.
Por otro lado, un total de 225 cámaras están en funcionamiento desde el pasado martes para controlar de modo automatizado si los conductores llevan puesto el cinturón de seguridad. Esos dispositivos se encuentran situados en pórticos o postes y el 60% están ubicados en carreteras convencionales, que son las que registran la mayor accidentalidad y siniestralidad, y el 40% restante en autopistas y autovías.