Alianza pública en Cataluña para atajar los rumores contra los inmigrantes

Barcelona, 21 feb.- Las tres administraciones catalanas, la autonómica, la provincial y la local, sumarán sus esfuerzos para atajar la propagación de tópicos y rumores con falsedades contra las personas inmigradas, que proliferan a consecuencia de la crisis económica y de ciertos discursos xenófobos de algunos partidos.

La Generalitat, la Diputación y el Ayuntamiento de Barcelona han presentado hoy el acuerdo al que han llegado para compartir los recursos que dedican a luchar contra los rumores infundados, los tópicos y los estereotipos vinculados a la inmigración que ponen en peligro la convivencia y la cohesión social.

El director general para la Inmigración, Xavier Bosch, la teniente de alcalde de Igualdad del Ayuntamiento de Barcelona, Maite Fandos, y la diputada provincial, Mireia Solsona, han explicado que el plan consiste en, a partir de la experiencia de cada institución, sumar las sinergias y desplegar una campaña ciudadana conjunta de sensibilización.

"Se trata de desmontar algunos de los falsos argumentos que habitualmente señalan a las personas inmigradas y romper tópicos sobre el fenómeno migratorio", ha dicho Solsona.

Dípticos, publicaciones, vídeos y cursos de formación de agentes antirrumores forman parte de la campaña ante "el aumento significativo de la rumorología alimentada por los efectos de la actual crisis económica", ha señalado Fandos.

Entre los rumores que las instituciones se han propuesto contrarrestar figuran el que los inmigrantes reciben más ayudas sociales, que son más incívicos, que abusan y colapsan la sanidad pública, que copan las becas de comedor escolar, que no pagan impuestos y no cotizan a la Seguridad Social o que abren sus comercios en horarios no permitidos.

Para contrarrestar todas estas falsedades, las tres instituciones se han conjurado para difundir ampliamente datos estadísticos que corroboran que se trata de falsedades que dañan a los colectivos de personas inmigradas.

Por ejemplo, las tres instituciones han remarcado que no existen prestaciones específicas para inmigrantes, que sólo el 5,5 % de los extranjeros que viven en Barcelona usan un centro de servicios sociales y que sólo un 15 % de los alumnos con becas-comedor de Barcelona son de nacionalidad extranjera.

Tampoco es cierto que los establecimientos regentados por inmigrantes -los badulaques (las tiendas de barrio), por ejemplo- abran ilegalmente todos los días y a todas las horas porque la normativa establece que todos los comercios de alimentación de menos de 150 metros cuadrados pueden abrir los festivos, excepto los cuatro días de cierre obligatorio -25 de diciembre, 1 de enero, 1 de mayo y 11 de septiembre-.