Así serán las carreteras por las que circularemos en el futuro

  • Inteligentes, autosuficientes, respetuosas con el medio ambiente, éstas son algunas de las cualidades que tendrán, según los expertos, las carreteras dentro de no tanto tiempo.

Carreteras del futuro
Carreteras del futuro
lainformacion.com

Juan ha olvidado el significado de las palabras "atasco", "accidente" o "gasolina". Estamos en el año 2030 y su coche se desliza por la carretera mientras él disfruta del paisaje y deja que sea ésta la que se encarga de manejar el volante. El rozamiento de las ruedas con el asfalto producen la energía necesaria para iluminar la calzada e incluso para que el coche de Juan apenas necesite repostar en una "electrolinera".

Es el futuro pero no tan lejano. "De aquí a 20 años las carreteras serán casi inteligentes, van a ser muy seguras, si te acercas a un vehículo enviarán una señal al coche para que se pare. En todo momento te guiarán por lo que se evitarán los embotellamientos, habrá más seguridad y menos tráfico" explica Alfonso González, responsable de programas de la Plataforma Tecnológica de la Carretera.

Pero para llegar a ello todavía hay que recorrer un largo camino en el que la investigación se focaliza en tres aspectos fundamentales: mejorar la seguridad vial, gestionar el tráfico y minimizar el impacto ambiental.

Algunos de estos proyectos de investigación están introduciéndose poco a poco en nuestro país, es el caso de los Sistemas Inteligentes de Transporte (ITS) que ya han sido instaurados en algunas carreteras del País Vasco o la Comunidad Valenciana.

"La infraestructura será capaz de comunicarse con los vehículos" explica Enrique Miralles Olivar, Director Técnico de la Asociación Española de Carreteras "este avance tecnológico contribuirá a mejorar la gestión del tráfico y la seguridad vial". De hecho, según datos del Parlamento Europeo una tecnología inteligente en los coches y los camiones contribuiría a prevenir más de 5.000 muertes en accidentes de carretera cada año (pdf).

Si nos centramos en el aspecto medioambiental los expertos coinciden: la carretera más modernas de España es la A-381, en Andalucia, premiada en 2004 por la IRF (Federación Internacional de la carretera), en la categoría de protección ambiental.

La calzada, de 80 kilómetros y que une Jerez con Los Barrios, atraviesa el Parque Natural de los Alcornocales por lo que su diseño exigía un especial cuidado con el entorno. Para ello, se construyeron pantallas antiruido con vegetación además de cinco falsos túneles recubiertos de tierra y replantados para que los animales puediesen cruzar.

Viaje en el tiempo

De momento, los coches voladores que aparecían en Blade Runner o en Regreso al futuro se han quedado sólo en la imaginación de sus autores. El desarrollo de las carreteras irá encaminado sobre todo a crear un espacio adecuado para el desarrollo del coche eléctirco. Así, hace unos días el ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, presentó un Plan que fijaba como objetivo alcanzar un parque de 250.000 vehículos de este tipo en 2014.

"Se está trabajando bastante en este asunto, desde los fabricantes hasta la infraestructura", afirma González, "de hecho, aunque todavía es sólo una hipótesis se está investigando el meter en la carretera una infraestructura que recargue al coche cuando pase".

Lo primera imagen con la que nos encontraremos, según los expertos, serán las electrolineras, para después y en un periodo de tiempo que no se atreven a aventurar, acabar con un sistema de inducción en el pavimento que evitaría las paradas de repostaje. En el siguiente vídeo se ve uno de los proyectos a este respecto presentado por el diseñador alemán Christian Förg:

En lo que a materiales se refiere se está investigando para conseguir pavimentos de mayor durabilidad, que consuma menos energía a la hora de su elaboración y que produzca un menor rozamiento con el coche para que se produzca un menor desgaste. En este aspecto una empresa estadounidense ganó recientemente un concurso del Gobierno gracias a la creación de un prototipo de carretera solar. Scott Brusaw es uno de los ideadores que trabaja en la creación de una textura similar a la del asfalto pero formada por paneles solares que irían introducidos en vidrios ultra-resistente. De este modo, la carretera además de autosuficiente sería capaz de producir gran cantidad de energía para otro tipo de usos.

En su superficie se incluirían además LEDS que marcarían las pistas y que servirían de aviso a los conductores para marcar los límites de velocidad, en caso de accidente, etc. Pese a lo prometedor del proyecto todavía está muy lejos de ser una realidad: "En España no hemos visto nada de este tipo, lo que sí existen son rampas que cuando pasa un coche con el peso se va recargando pero en placas solares no se ha hecho nada porque de momento son muy caros los paneles", explica González.

De momento son muchas las alternativas que hay sobre la mesa aunque todas parecer concluir en el coche eléctrico. Por ahora sólo queda esperar, abrocharse en cinturón y desear un buen viaje al futuro.

Mostrar comentarios