Madrid, 24 ene.- La llegada de inmigrantes ilegales a España descendió un 30 por ciento en 2012, un porcentaje que alcanza el 50 por ciento en el caso de Canarias, prácticamente cerrada, según el Ministerio del Interior, como vía de acceso de ese colectivo.
Así lo ha puesto de manifiesto en rueda de prensa el titular de Interior, Jorge Fernández Díaz, quien ha explicado que el año pasado entraron en España de forma ilegal 3.804 inmigrantes, frente a los 5.411 del año anterior y 39.180 en 2006, el año de la denominada "crisis de los cayucos".
Interior ha dado por cerrada prácticamente la llegada de inmigrantes ilegales por la fachada atlántica (Canarias), pero ha detectado un aumento de la entrada de estas personas por Melilla, la única vía que ha registrado un aumento debido a la presión de los inmigrantes subsaharianos que llegan a Marruecos.
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