Bélgica planea enviar dos aviones Hércules y un helicóptero a Mali

Bruselas, 15 ene.- Bélgica va a proponer el envío de dos aviones tipo "Hércules" C-130 y un helicóptero medicalizado para apoyar la ofensiva liderada por Francia en Mali contra los grupos islamistas que controlan el norte del país africano, informó hoy el ministro belga de Exteriores, Didier Reynders.

El jefe de la diplomacia belga confirmó a la emisora RTBF que en el despliegue de esos recursos se movilizarían unos 80 militares belgas, y que el objetivo es prestar apoyo logístico y de formación y no enviar tropas de combate, precisó.

Un Consejo de Ministros extraordinario se reunirá hoy para analizar la situación en Mali, una reunión en la que el Gobierno del primer ministro, Elio Di Rupo, puede confirmar este compromiso militar, indica la agencia Belga.

Por su parte, el ministro belga de Defensa, Pieter De Crem, ya había apuntado el lunes a la posibilidad de enviar apoyo logístico para respaldar la operación francesa en el país africano, que se limita al transporte de tropas.

Recordó que un avión C-130 belga ya está en la región, y señaló que el segundo podría llegar a partir del miércoles, mientras que el helicóptero medicalizado lo hará el lunes próximo.

Reynders indicó que en septiembre pasado Bélgica ya dio su conformidad a participar en una intervención internacional encabezada por el Gobierno maliense, con el apoyo de la Comunidad Económica de los Países del África Occidental (CEDEAO) y de la Unión Africana (UA).

"El objetivo es ceder lo más rápidamente posible el relevo a una operación internacional en la que seguiríamos teniendo un papel", subrayó.

Desde su punto de vista, Francia ha actuado "de urgencia" y "anticipando una operación internacional", al tiempo que lamentó la "lentitud" de la movilización internacional.

Actualmente hay 183 ciudadanos belgas registrados en los servicios consulares en Mali, a los que el Gobierno ha recomendado abandonar el país o, al menos, limitar sus desplazamientos incluso en la capital, Bamako.

El Consejo de Seguridad de la ONU respaldó en la madrugada del martes la intervención militar de Francia (que por ahora ha desplegado a 750 militares) en Mali para evitar que los radicales islámicos se hagan con el control del país y volvió a pedir un proceso político de reconciliación nacional.

Reynders participará el jueves en Bruselas en un consejo europeo de Ministros de Exteriores que se celebra con carácter extraordinario para analizar posibles acciones de la Unión Europea en apoyo de Mali.

La jefa de la diplomacia de la UE, Catherine Ashton, precisó el lunes que se considera acelerar el despliegue de la propuesta misión europea para formar a las fuerzas de seguridad malienses.

Los Veintisiete, según Ashton, también prevén ayuda financiera y logística para el despliegue de la fuerza militar conjunta africana (AFISMA), aprobada por la ONU, y un apoyo directo al Gobierno de Mali para que pueda hacer frente a la situación.

El aumento de la tensión en Mali, donde grupos islámicos radicales armados del norte del país intensificaron la pasada semana su ofensiva hacia el resto de la nación y amenazaron con tomar la capital, Bamako, después de haber conquistado Kona, desencadenó la intervención francesa.

Los integrantes de ése y otros grupos islámicos radicales como Monoteísmo y Yihad en África Occidental (MYAO) y Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI), controlan el norte de Mali desde junio pasado.

En esa fecha arrebataron el territorio al movimiento independentista tuareg Movimiento Nacional de Liberación de Azawad (MNLA), que en marzo de 2012 aprovechó el vacío de poder de un golpe de estado para controlar esa región norteña.