Burros que gripan y ajos que adornan cuellos, anécdotas del Día del Blusa

Vitoria.- Las cuadrillas de blusas de Vitoria han dado hoy el pistoletazo de salida a las fiestas de la capital alavesa con una carrera matutina de burros, en la que ha habido motores que han gripado, y con el tradicional mercado de ajos, cuyas ristras han adornado los cuellos de centenares de vitorianos.

Miles de blusas se han echado hoy a las calles de la capital alavesa ataviados con la indumentaria típica de sus respectivas cuadrillas para calentar motores de cara a la bajada de Celedón, el popular aldeano que cada 4 de agosto surca el cielo de Vitoria colgado de un paraguas, para dar inicio a las fiestas de La Blanca.

Algunos empezaron la fiesta anoche pero esta mañana ninguno ha faltado a una de las citas ineludibles del día, la tradicional carrera de burros que se disputan las cuadrillas festivas.

El improvisado circuito se ha instalado en la Plaza de la Virgen Blanca, donde se han congregado miles de personas para animar a los asnos y a sus inexpertos jinetes.

Las peripecias de los blusas a lomos de los jinetes han hecho pasar un buen rato a los vitorianos y turistas que han seguido la prueba desde cerca.

Algunos blusas han recurrido a las zanahorias para conseguir que sus burros corrieran y los menos previsores, que se han presentado en la prueba sin nada que echar a la boca de sus asnos, han tenido que bajarse de sus lomos y tirar de ellos con todas sus fuerzas.

Algunos asnos han "gripado" sus motores nada más oír el silbato que anunciaba el inicio de la prueba y se lo han puesto muy difícil a los jinetes de txapela y blusón.

Tras las cinco vueltas de rigor a la Plaza de la Virgen Blanca, ha levantado la copa de ganador un blusa de la cuadrilla "Txolintxo", ante el júbilo de sus compañeros de jolgorio.

Sin embargo, como viene siendo habitual en los últimos años, otra cuadrilla se ha autoproclamado ganadora de la carrera, los "Gasteiztarrak".

El público, ajeno a la polémica, ha dado por finalizado el espectáculo y se ha dirigido poco a poco hacia los puestos del mercado de venta de ajos, donde han podido adquirir ristras por entre 6 y 25 euros, en función del tamaño y de la calidad de los mismos.

Los más mayores han adornado sus cuellos con las ristras de ajos y han seguido disfrutando de la fiesta ataviados con los aromáticos collares.

El centro de la capital alavesa se ha sumergido en un bullicio constante y el tiempo, aunque ha amenazado con descargar alguna gota a primeras horas de la mañana, ha aguantado y ha dejado disfrutar de la fiesta sin paraguas ni frío.

Por la tarde, los blusas y neskas animarán el "paseíllo" de ida y vuelta de la Plaza de los Toros con los sones de las charangas y fanfarres y la cuadrilla "Hegotarrak" acogerá entre sus filas a niños ucranianos que pasan el verano acogidos en familias alavesas.

En la Plaza de Toros se celebrará una corrida mixta protagonizada por los diestros Diego Urdiales y César Jiménez y el caballero rejoneador Leonardo Hernández.

Además, el programa de actos se completará con partidos de pelota y con el XLVII Trofeo Virgen Blanca de Vela.