¿Carga justificada o provocación organizada? El polémico vídeo de los encapuchados y la Policía

Lo que debería haber sido una protesta pacífica acabó anoche en una batalla campal con 35 detenidos y 64 heridos. Aunque a lo largo de toda la jornada de ayer hubo varios conatos de refriega entre los manifestantes del 25S y los antidisturbios, las carreras y los golpes comenzaron a eso de las 21 horas.

En las imágenes los momentos previos a la carga policial, retransmitidas en directo por RTVE, se aprecia como un grupo de encapuchados provoca insistentemente a los agentes agitando banderas de color rojo y negro, mientras se cubrían con escudos caseros ocultos tras una pancarta.

En un determinado momento, uno de los integrantes del grupo de manifestantes lanza un golpe con la bandera contra los miembros de los cuerpos de seguridad, que se organizan y, tras apartar levemente a los medios de comunicación, cargan con dureza contra los protestantes.

A partir de ahí, el caos: caídas, agresiones y arrestos. Los antidisturbios se aplican con contundencia en la detención de varios presuntos antisistema y los manifestantes más violentos aprovechan para patear a un agente que pierde el equilibrio.

Lo más sorprendente es que en un determinado momento de la refriega, un grupo de encapuchados parece cambiar de bando y, a rastras, lleva a varios manifestantes a la zona segura de la policía para que sean detenidos y esposados.

Algunos asistentes a la manifestación de anoche aseguran que esos supuestos protestantes que ocultaban su rostro con capuchas y pañuelos eran miembros de la policía secreta infiltrados en la manifestación para reventarla. De hecho, les culpan de provocar la agresión que desencadeno la carga.

Igual que en Barcelona

Aunque no hay pruebas que respalden esta versión, no es la primera vez que los cuerpos de seguridad se camuflan entre manifestantes para, empleando tácticas de guerrilla urbana, encender la chispa de la violencia.

Así sucedió el pasado 15 de junio de 2011, cuando un grupo de Mossos d'esquadra de paisano se hicieron pasar por manifestantes del 15M y agredieron sin aparente motivo a varios antidisturbios a las puertas del parlamento catalán en Barcelona.

Las imágenes grabadas con teléfono móvil por algunos de los ciudadanos presentes en la protesta demostraron la presencia de agentes entre los indignados y cómo provocaron las agresiones para posteriormente salir escoltados por sus compañeros mientras el resto de ciudadanos les gritaban.

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