Las Palmas de Gran Canaria, 30 sep.- Cuatro hermanas cuyos padres murieron en el accidente de avión de Spanair en agosto de 2008, en el que fallecieron otras 152 personas, han reclamado hoy, en el primer juicio de lo Mercantil que se celebra por esta causa, que la compañía Mapfre les indemnice con 18,3 millones de euros.
Su abogado, Antonio Marrero, ha manifestado al tribunal que se trata de una catástrofe que ha provocado un auténtico "calvario" a esta familia, que aún sufre sus consecuencias, en el juicio, que ha quedado visto para sentencia y a expensas de si se acumulan o no todos los procedimientos abiertos por esta causa.
El magistrado del Juzgado de lo Mercantil número 1 de Las Palmas de Gran Canaria, Alberto López Villarrubia, ha indicado al concluir la vista que desde el Juzgado de Primera Instancia número 11 de Madrid ha recibido una petición para que no dicte sentencia hasta que este resuelva la acumulación de todos los procedimientos solicitada por Mapfre.
La defensa de Mapfre, ejercida por Paulino Fajardo, que ha cuantificado los daños demandados por estas cuatro hermanas en 274.167 euros, ha considerado también el accidente como una catástrofe y ha subrayado que han aplicado la sentencia "más generosa" habida en España, la del accidente de Chinchilla, para calcular la indemnización.
Fajardo ha destacado que, al tratarse de una catástrofe, el "dolor" generado en las víctimas es aún mayor, por lo que ha pedido disculpas y ha dicho que Mapfre quiere "dar la cara" y "reconoce su responsabilidad" como aseguradora de Spanair.
El letrado de la aseguradora ha afirmado que lo único que les separa de los demandantes es la cuantía de la indemnización, sobre la que "difieren mucho", así como los criterios legales para su cálculo.
Marrero ha explicado que se ha fundamentado en el convenio de Montreal de 2004 y en el reglamento del Parlamento Europeo para calcular la cantidad reclamada, así como en jurisprudencia del Tribunal Supremo para cifrar los daños causados y el lucro cesante generado por la muerte de los padres de estas cuatro hermanas.
Asimismo, ha rechazado que se pueda aplicar el baremo establecido para los accidentes de tráfico, como pretende Mapfre, porque los daños psíquicos y morales generados son de "gran magnitud" por tratarse de un "desastre", como así lo han corroborado dos catedráticos en psicología clínica, María Paz García-Vera y Víctor Lubillo.
El abogado ha subrayado que sus representadas estuvieron seis días sin tener noticias de sus padres y "encerradas" en un hotel de Madrid por temor a salir a la calle ante el impacto mediático que causó el suceso.
El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Las Palmas de Gran Canaria también ha celebrado hoy otro juicio de una quinta hermana, quien ha reclamado por el fallecimiento de sus progenitores una indemnización de 852.000 euros, mientras que la aseguradora ha ofrecido el pago de 62.000 euros.
Así mismo, este Juzgado ha dejado visto para sentencia, pero a expensas de lo que se decida en el de Madrid sobre la acumulación de los procedimientos, otra tercera demanda presentada contra Mapfre por ocho familiares de seis fallecidos en el avión de Spanair, tras celebrar una audiencia previa.
En este caso, los demandantes exigen el pago de 12 millones de euros y Mapfre ofrece 315.000 euros a estas familias, que, además, mantienen una causa en otro juzgado de Las Palmas de Gran Canaria en la que reclaman 56 millones de dólares (41,5 millones de euros) a Boeing, por fabricar y comercializar un "producto defectuoso" y que el daño se fije conforme a la legislación estadounidense.
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