Londres.- El primer ministro británico, David Cameron, subrayó hoy en Cardiff (Gales) que su Gobierno continuará "intensificando la presión" sobre el régimen de Muamar el Gadafi y señaló que ha llegado la hora de que el dictador "se marche".
En un discurso pronunciado dentro de la conferencia de primavera del Partido Conservador, el jefe del Ejecutivo británico afirmó que la "estrategia" del Reino Unido con respecto al conflicto en el país magrebí estaba "clara".
"Continuaremos intensificando la presión sobre el régimen. Continuaremos dejando claro que la justicia internacional tiene una larga trayectoria y que aquellos que cometan crímenes contra la humanidad no quedarán impunes", dijo Cameron.
El líder tory también indicó que el Reino Unido "seguirá prestando ayuda humanitaria a los afectados por esta crisis y continuará exigiendo que las organizaciones humanitarias lleguen hasta los que necesitan las ayudas".
"Junto con nuestros aliados, continuaremos elaborando planes para afrontar cualquier eventualidad", manifestó.
En su comparecencia frente a sus correligionarios en Gales, Cameron también lanzó un ataque contra el anterior partido en el Gobierno, el Laborista, al que acusó de haber fraguado "negocios no de fiar en el desierto", en alusión a los polémicos contactos que mantuvo el ex primer ministro laborista Tony Blair, con Gadafi en el año 2004.
El líder conservador instó también a la "solidaridad" con aquellos "que hoy se encuentran en las calles del norte de África y en Oriente Medio".
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