Jartum, 13 jul.- Decenas de personas, la mayoría jóvenes activistas, fueron detenidas hoy en Jartum y otras ciudades sudanesas en una nueva jornada de protestas contra el régimen del presidente de Sudán, Omar Hasan al Bachir, denunciaron fuentes de la oposición.
Según las mismas, las fuerzas de seguridad disolvieron con gases lacrimógenos y porras las marchas que salieron de varias mezquitas tras el rezo del mediodía, en el marco del denominado "viernes de Al Kandaka", palabra que en la lengua del pueblo nubio, del norte de Sudán, significa la "mujer muerte".
Jóvenes opositores denunciaron que la policía irrumpió en las viviendas de varios de ellos y los detuvo por convocar en internet las protestas.
Por su parte, cientos de fieles de la mezquita de la cofradía "Al Ansar", en el oeste de Jartum, intentaron salir a la calle en una marcha, pero las fuerzas antidisturbios los dispersaron con gases lacrimógenos, afirmaron los opositores.
Las mezquitas de "Al Ansar" constituyen la base de apoyo del Partido Al Uma, el mayor de la oposición sudanesa, que está liderado por el exprimer ministro Sadeq al Mahdi.
El dirigente político advirtió en declaraciones a la prensa, tras el rezo, de que "la violencia que usa el régimen contra las manifestaciones pacificas sumergirá al país en la sangre".
En este sentido, insistió en que su partido y las demás fuerzas de la oposición sudanesa buscan generar un cambio en el país sin violencia y derramamiento de sangre.
Los activistas opositores revelaron que otras protestas fueron disueltas por en las ciudades de Kasala y Al Abiad, ubicadas en el este y oeste del país, respectivamente.
El pasado martes, durante la apertura de una fabrica de azúcar en el centro de Sudán, Al Bachir afirmó que las manifestaciones contra su Gobierno no forman parte de las revueltas y el proceso de cambios que vive el mundo árabe desde 2011.
Las protestas en Sudán, que duran ya un mes, se han intensificado después de que las autoridades anunciaran el pasado 18 de junio un plan de austeridad.
El proyecto tiene como objetivo declarado atajar la crisis económica que sufre el país por la pérdida de ingresos petroleros tras la independencia de Sudán del Sur, que el lunes pasado cumplió su primer aniversario.
El pasado 4 julio, una coalición de partidos opositores sudaneses firmó un documento titulado "La Alternativa Democrática" para administrar el país tras una eventual caída del régimen de Al Bachir, que lleva en el poder desde 1989.
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