Delibes refuta que la única salida de la crisis sea consumir más

Sevilla.- El científico y escritor Miguel Delibes considera un "error" sostener que la única salida a la crisis sea "consumir más" y critica, en una entrevista con Efe, que se rebaje la protección medioambiental por las dificultades económicas, ya que supone "una trampa" con la sociedad y con la naturaleza.

Delibes, profesor de investigación de la Estación Biológica de Doñana (CSIC) y destacado divulgador ambiental, ha lamentado que la crisis actual esté siendo una "oportunidad perdida" para reflexionar sobre nuevos modelos económicos más sostenibles.

"La crisis tendría que haber servido para darnos cuenta de que podemos vivir con menos cosas y buscar un sistema que no requiriera consumir lo que no necesitamos", ha apostillado.

En su opinión, la reacción ante la recesión ha evidenciado que muchos aspectos ambientales "no estaban tan consolidados" como se creía y ha devaluado la protección ambiental a "algo parecido a un lujo que te puedes permitir cuando todo va bien, pero que cuando las cosas van mal es donde se puede recortar".

Este estudioso del lince ibérico se confiesa consternado por que la única salida que se plantee a la crisis "consista en consumir más, porque pone de manifiesto, de una forma casi insultante, muy cruda, que este sistema nos hace consumir lo que no necesitamos".

Frente al mensaje dominante de "no compres lo que necesites sino consume aunque no lo necesites" para que el sistema no se desplome, Delibes contrapone la evidencia científica de que "somos demasiados, consumimos demasiado y no hay recursos ni capacidad de depuración en la Tierra para tantas personas y para tantos seres vivos".

"La invitación a consumir más recursos, aunque no hagan falta, es realmente una invitación a destruir más naturaleza", ha aseverado.

Admite que los naturalistas yerran en muchos de sus pronósticos y que algunos riesgos sobre los que advertían décadas atrás "no van tan mal hoy", pero también constata que España ha sufrido innegables pérdidas de biodiversidad en los últimos años, como la destrucción de los ecosistemas costeros.

La marginación de la política medioambiental se evidenció en España, según Delibes, con el cese de la ministra Cristina Narbona, "porque era demasiado ambientalista" y ahora se constata con ejemplos como que la derrota electoral de Obama arrincone la lucha contra el cambio climático o que apenas se hable de la cumbre mundial sobre la biodiversidad de Cancún (México).

Se confiesa "decepcionado" por esta devaluación de la política ambiental cuando "es el medio ambiente el que está detrás de las crisis económicas", ya que, en su opinión, "las burbujas no son solo financieras; burbuja es también vivir en un estado de riqueza artificial, por encima de los recursos que la Tierra nos puede proporcionar".

Para Delibes, los beneficios que la naturaleza aporta al hombre "se siguen valorando mal" y concluye: "Si respirar nos costara dinero valoraríamos mucho más los árboles que producen oxígeno".

Ha alertado contra los intentos de rebajar unas leyes de protección ambiental que "suponen una autolimitación" y nacieron de "pactos de la sociedad consigo misma y con el medio ambiente" y que se deben de respetar "cuando las cosas se pongan difíciles, no cuando sea fácil, porque para eso no hay que hacer leyes".

"Me parece muy feo, muy mal, una trampa que nos hacemos a nosotros mismos, hacer leyes medioambientales y cuando la situación se pone un poco complicada, cambiarlas", ha concluido.