Efectivos de la unidad militar de emergencias se incorporarán al incendio de las estribaciiones de la sierra de gredos

AVILA, 21 (SERVIMEDIA/ICAL)

El Centro Provincial de Mando del Operativo de Incendios Forestales de la Junta de Castilla y León declaró poco antes de las dos de la tarde de hoy el nivel 2 en el incendio que se registra desde el viernes en las estribaciones de la Sierra de Gredos (Ávila) que ya ha quemado más de 500 hectáreas de superficie. Según se indicó desde la Consejería de Fomento y Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, está previsto que al operativo se incorpore un centenar de efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).
El fuego ha afectado principalmente a pasto y matorral, así como a algo de arbolado, en el término de Navalacruz, aunque también se ha extendido a los de Mengamuñoz, Sotalbo y La Hija de Dios.
De esta forma, serán unos 400 los efectivos que intervendrán en las labores de extinción. Entre otros, en el terreno se encuentran trabajando 15 cuadrillas de tierra, cinco brigadas BRIF y otras siete helitransportadas, dos bulldozer, tres autobombas, cuatro hidroaviones, ocho helicópteros de extinción y uno de coordinación, con la dirección de 11 agentes medioambientales y 10 técnicos de la Junta.
A estos efectivos, se incorporará un centenar de efectivos de la UME -50 de Madrid y 50 de León-, aunque, como elementos de auxilio, se cuenta, además, con una unidad meteorológica móvil del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, así como con un puesto de mando avanzado móvil de Protección Civil de la Junta.
DESDE EL VIERNES
El incendio se originó a las 19.35 del viernes 18, en las inmediaciones del término de Navalacruz.
Según las primeras investigaciones, el origen se encuentra en causas humanas, “posiblemente, una negligencia”, aunque lo “escabroso” del terreno y la “pedregosidad” dificultó desde un primer momento “enormemente” los trabajos de extinción.
Por ello y pese a los numerosos medios desplegados desde su inicio, a las 23.40 horas de ese mismo día se declaró el nivel 1 de alerta.
Tras los arduos trabajos de esa noche, a las 7.45 horas del sábado, el incendio se dio por controlado, aunque no extinguido, por lo que se continuó, durante toda la jornada, el trabajo de remate, con varios medios de extinción.
Sin embargo, la “inestabilidad” atmosférica desencadenó diversas tormentas con fuertes y cambiantes vientos que “reactivaron” las llamas en gran parte del frente, hacia las 15.10 horas.
Así, nuevos medios se dirigieron al incendio, que había adoptado una “inusitada virulencia” y continuaba su progreso hacia el norte. El humo intenso y las tormentas dificultaron el apoyo de los medios aéreos, hasta el punto de que “algunos de ellos se vieron forzados a abandonar la zona” o no pudieron regresar a ella tras haber ido a sus bases a repostar.
Los medios de la Junta, entre los que se encontraban tres helicópteros, con sus dotaciones de personal técnicos y numerosas cuadrillas de tierra, contaron con el auxilio de los medios del Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino -cuatro hidroaviones procedentes de Salamanca y Madrid, así como tres brigadas BRIF procedentes de Ávila, Toledo y Cáceres- y de la Comunidad de Madrid, que aportó dos helicópteros más.
Los flancos siguieron amenazando las áreas cercanas a Navalacruz, pero la cabeza del incendio siguió avanzando hacia el norte, fuera de la capacidad de extinción de los medios, y al caer la noche alcanzó los montes cercanos al Puerto de Menga.
Durante toda la noche del sábado al domingo, en este sentido, los trabajos de extinción, centrados en el concurso de cuadrillas terrestres, motobombas y dos bulldozer, uno de ellos procedente de la vecina Segovia, tuvieron que hacer frente a situaciones de “elevado riesgo” para detener los frentes que se dirigían hacia los pueblos de La Hija de Dios y Mengamuñoz.