El daño cerebral que dejan los atracones de alcohol es a veces "irreversible"


El "binge-drinking", expresión anglosajona referida al consumo de alcohol en atracones, practicado por muchos adolescentes españoles los fines de semana, "puede suponer un daño neuronal inmediato de gravedad considerable" y no siempre reversible.
Lo dijo este jueves José Javier Miguel-Hidalgo, del Departamento de Psiquiatría y Comportamiento Humano del Centro Médico Jackson de la Universidad de Misisipi, en una charla titulada "Neuropatología prefrontal de la depresión y el alcoholismo", pronunciada en la Facultad de Medicina y Odontología de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU).
En su discurso, el experto señaló que los daños cerebrales a veces no son reversibles, como ocurre con los provocados por el "binge-drinking", por ejemplo.
Miguel-Hidalgo señaló que existen similitudes entre los cerebros de alcohólicos y de sujetos con depresión. Las personas que aúnan alcoholismo y depresión, dijo, sufren cambios degenerativos más graves, es decir, daños neuronales más importantes, que las que tienen sólo uno de los dos problemas.
El alcoholismo, además de provocar síndrome de abstinencia y hacer que se dejen de lado actividades placenteras, "puede provocar psicopatologías emocionales que incrementan las probabilidades de conductas suicidas", sentenció el especialista.

Mostrar comentarios