Rupert Patterson-Ward ha tardado poco en aprovechar la polémica entre Mourinho y Carneiro, la doctora del Chelsea apartada del equipo. Dolido por una ruptura en la que parece que fue ella la que le expulsó del campo esta vez, el exnovio de Carneiro dice que ella ha arruinado su vida, porque le ha usado y escupido como si nada.
Hace no mucho el mismo Rupert, gerente comercial, pensaba que podría tener una familia con ella. El diario The Sun no ha perdido la oportunidad de hablar con ese hombre dolido que, pese a todo, sigue calificando a lo doctora como una mujer de fuego. “Yo estaba perdidamente enamorado de ella”, confiesa Rupert.
No lo está tanto Mou de ella, tras llamarla de todo por entrar al campo para atender a Hazard. El público está con Carneiro, que ya le ha dado las gracias después de que Mourinho dijera que no volvería a contar con la doctora en el banquillo porque no sabe de fútbol y en algunas situaciones, hasta el médico debe saber.
"Estaba seguro de que el jugador no tenía un problema grave. Tenía un golpe y estaba muy cansado, pero la doctora me dejó con ocho jugadores. Mou también parece ser de lo que no se andan con medias tintas. Carneiro no estará presente en las sesiones de entrenamiento, ni en los partidos o ni en el hotel de concentración. Fuera de juego.
Carneiro fue ascendida al primer equipo del Chelsea por André Villas-Boas en 2011 y ha trabajado desde entonces con Roberto di Matteo, Rafa Benítez y ahora con Mourinho.
De padre español y madre británica, ha estudiado en la Universidad de Nottingham y la Universidad Queen Mary de Londres. Rupert pensará que eso de que te saquen tarjeta roja va por barrios: Carneiro se la sacó a él en lo personal, y Mou ha hecho lo mismo con ella en lo profesional. ¿Habrá reconciliación doble? Nunca se sabe.
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