El informe PISA vuelve a dictaminar que los alumnos españoles están por debajo de la media de la OCDE

  • Malas noticias: según lo esperado, el informe PISA, que mide el nivel educativo de los alumnos de los países de la OCDE, deja a España en muy mal lugar: los datos son tan malos como los de la anterior entrega, en 2006. Sólo mejora la puntuación en lectura, que hace tres años se había desplomado. Además, pone en relieve el altísimo número de repetidores: un 36% de los estudiantes.
Fernando de Luis-Orueta

El informe PISA 2009, que realiza cada tres años la OCDE, concluye que la educación en España apenas ha mejorado su situación. Respecto a la prueba anterior, sólo sube la puntuación en comprensión lectora (481 puntos, 20 más que en 2006, con lo que recupera el dato de las primeras ediciones). Aún así, sigue por debajo de la media de la OCDE, que está en 493 puntos. Peor es la situación en matemáticas y ciencias, que repiten los pobres datos de de 2006.

Las mayores diferencias dentro de España se presentan entre estudiantes del mismo centro y no entre comunidades autónomas ni entre educación pública y privada. Sólo Finlandia tiene unos niveles de variación entre centros menores a los españoles. Aún así, Madrid, Castilla y León, Cataluña, La Rioja, Navarra, Aragón, País Vasco, Asturias, Cantabria y Galicia están ligeramente por encima de la media del país. Los peores resultados los obtienen Andalucía, Baleares y Canarias. Las chicas tienen mejor valoración en lectura, los chicos en matemáticas, mientras en ciencia están muy igualados.

Mariano Bedera, secretario de Estado de Educación, ha asegurado que estos resultados están en la media de los países de su entorno. Sin embargo, admite que España tiene sólo un 3% de alumnos en los niveles más altos, mientras que la media de la OCDE está en el 8%.

¿Cómo se ha hecho el informe?

PISA no mide conocimientos, sino capacidades: se trata de saber si los estudiantes son capaces de comprender un texto o analizar un problema. En la prueba de 2009 se ha puesto especial énfasis en el apartado de comprensión lectora, que es la competencia en la que los alumnos españoles salen menos mal (10 puntos por debajo de la media). De hecho, ha subido 20 puntos respecto a 2006, un año en que el Ministerio cree que se produjo un error técnico el examen, que provocó un desplome en la calificación de los estudiantes.

En este apartado, una de las principales conclusiones es la importancia de la motivación ante la lectura."Al niño se le educa dentro y fuera del aula", recuerda Bedera. Así, por ejemplo, cuanto mayor es el número de libros en casa, mejor es el resultado. La diferencia entre el estudiante cuya familia tiene menos de 10 libros en casa y el que tiene más de 500, supera los 100 puntos.

Además, este año se ha añadido una prueba específica sobre habilidad para la lectura en soporte digital. Curiosamente, el informe concluye que los alumnos más familiarizados con los ordenadores, obtienen mejores resultados en la prueba general.

Problema con los repetidores

Una de las conclusiones que más llaman la atención del estudio, es que España es uno de los países con mayor número de alumnos que repiten curso: un 36%. La situación se agrava cuando el foco se cierra sobre el repetidor: cuando hace el curso por segunda vez, sus conocimientos apenas mejoran. Bedera reconoce que este aspecto es uno de los grandes retos para la educación española y advierte que este problema tiene raíces muy profundas, en la educación primaria.

En términos generales puede decirse que repiten más chicos que chicas, que es más frecuente cuanto menor es la capacidad económica de la familia, la implicación de los padres y su nivel cultural. Además, este problema se produce con más frecuencia entre los inmigrantes.

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