El juez Calatayud avisa que el móvil es "idóneo" para "delitos de clase media y alta"

El juez de Menores de Granada Emilio Calatayud ha advertido este martes de que los teléfonos móviles son "un instrumento idóneo para cometer los delitos de la clase media y media-alta como son acosos, amenazas e injurias contra el honor y la intimidad".

Calatayud ha hecho esta reflexión en el marco de la conferencia inaugural del curso de verano de la UAL sobre 'Adicciones en Menores' que él dirige y ha dado comienzo en Purchena (Almería).

"Las nuevas tecnologías ya son una droga, especialmente los móviles, que generan verdaderos síndromes de abstinencia", ha indicado para señalar que al sistema llegan "muchos chavales detenidos por maltrato pero no son maltratadores sino que se les ha castigado sin el uso de estas tecnologías".Aumento del consumo de drogas y alcohol en menores

Calatayud también ha alertado sobre el consumo de alcohol en menores y ha asegurado que es la "puerta de la drogadicción". "Por eso soy contrario a las fiestas porque son botellones institucionalizados. Esta es la hipocresía social porque los menores empiezan a consumir con 12 y 13 años y poco se hace para evitarlo", ha apuntillado.

Al hilo de esto, ha considerado que el ambiente actual hace que parezca que "hayamos vuelto a mayo del 68 con respecto al consumo de marihuana cuando fumarse un porro era de intelectuales". "Yo siempre digo que cuando entré de juez, en el 80, un drogata no duraba 15 años porque era la época de la heroína y morían por el Sida. Ahora no mueren, pero como empiezan a muy temprana edad, a los 19 años hay muchos jóvenes que tienen problemas mentales", ha añadido.

Para Calatayud, la autoridad de los padres ha quedado en "entredicho" ya que se les ha quitado el derecho sancionador. "Toda autoridad ha de tener derecho sancionador. Se ha confundido un cachete con un maltrato y esto es una barbaridad", ha señalado para atribuir a esta situación el que "muchos padres" no sepan "cómo abordar estos temas cuando se encuentran, por ejemplo, con el problema de cómo obligar a sus hijos de 16 años a no salir a la calle a partir de las doce de la noche".

En este curso, también se abordarán mesas de debate, precisamente, con los padres "porque tienen que ejercer como tales ya que no son amigos de sus hijos, son una autoridad", ha indicado el juez, para quien esa recuperación de la autoridad también pasa por la escuela. "El maestro también ha de contar con autoridad y no ser un colega. Claro pero esa autoridad se la tienen que reconocer los propios padres y los políticos", ha puntualizado.

Por último, como parte de la solución a esta lacra social, Calatayud ha vuelto a pedir un Pacto por el Menor "porque tanto los padres, la escuela, la sociedad y los medios de comunicación están implicados en la educación de los menores".