El Mediterráneo "se ha convertido en una tumba" para muchos emigrantes

Madrid, 18 dic.- La Unión Europea debe luchar contra la inmigración irregular ayudando al desarrollo de los países de origen con proyectos que creen empleo, ha dicho hoy el embajador de la Liga Árabe en España, Hassine Bouzid, quien ha lamentado que el Mediterráneo se haya "convertido en una tumba" para muchos de ellos.

"Nuestro mar Mediterráneo ha sido siempre una cuenca de cooperación y orgullo (entre el norte y el sur), y ahora desgraciadamente se ha convertido en una tumba para muchas personas", ha apuntado Bouzid al referirse a los "miles de emigrantes que han perdido la vida" intentando llegar a Europa en embarcaciones precarias.

En una entrevista con Efe antes de participar en un acto en la Casa Árabe de Madrid para celebrar el Día del Emigrante Árabe, Bouzid ha recordado que estos emigrantes huyen de "la miseria y el elevado desempleo" en sus países de origen.

En ese contexto, ha apelado a los países de origen para que "controlen sus fronteras" y a las naciones europeas receptoras de la inmigración a que "ayuden a la gente a quedarse en su país con proyectos que creen empleo".

Asimismo, ha pedido a "a nuestros amigos españoles y al Gobierno español que les consideren como ciudadanos de pleno derecho", al referirse a los inmigrantes árabes en España.

También la Unión Para el Mediterráneo (UPM), que reúne a países de ambas orillas del mar y que hace poco ha comenzado su andadura como organización, "tiene un papel importante", ha dicho el embajador árabe quien ha recordado que sus miembros han acordado dar prioridad a proyectos de desarrollo que creen empleo.

El mundo árabe "está lleno de promesas, recursos y proyectos", ha subrayado al mencionar la llamada "primavera árabe" y los cambios importantes que ha producido y el proceso democratizador que inició hace tres años.

"La revolución no ha terminado", ha afirmado al señalar que en ese proceso de democratización "se pide empleo, libertad de expresión e igualdad".

Tres años después del comienzo de este movimiento en países como Túnez, Egipto o Libia, "solo hemos alcanzado la libertad de expresión", ha manifestado antes de lamentar que no se haya mejorado mucho la situación en materia de empleo o equilibrio regional.

Por otro lado, Bouzid se ha mostrado "optimista" respecto a que Europa salga de la crisis en los próximos años, lo que beneficiará también a los emigrantes árabes.

Ha explicado que entre un 30 y un 35 por ciento de los inmigrantes árabes que residen legalmente en España están en el desempleo y muchos se han ido a otros países en busca de trabajo.

"Esperamos que España supere esta crisis lo más rápidamente posible", ha dicho Bouzid, que ha incidido en que este país es "un gran amigo del mundo árabe" y de los europeos que mejor comprende a su región.

Para celebrar el Día del Emigrante Árabe se rinde homenaje hoy a dos miembros destacados de la comunidad árabe en España y por primera vez a una organización española: la Comisión Católica Española de Migración en reconocimiento de su servicio a los inmigrantes, según ha explicado Bouzid.

En el acto en la Casa Árabe en Madrid participan también el embajador de Argelia y decano del grupo de embajadores árabes acreditados en España, Mohammed Hanèche; el profesor de la Universidad de Cádiz (sur de España), Mohamed Dahiri, y el director de la institución, Eduardo López Busquets.