El ocho por ciento de los españoles nunca se ha medido la tensión

Madrid, 17 may.- El ocho por ciento de los españoles nunca se ha medido la tensión arterial, un indicador básico de la salud cardiovascular, ya que unos niveles elevados aumentan la posibilidad de sufrir un accidente cerebrovascular o un ataque cardiaco.

Son datos que se han dado a conocer en el Día Mundial de la Hipertensión y que se desprenden de un estudio realizado sobre una muestra de 1.500 encuestados mayores de edad, hombres y mujeres y con representatividad en todas las comunidades autónomas.

El estudio, realizado por PiC Solution, ha constatado que el 37 por ciento de los encuestados se mide la tensión en sus hogares, frente al 62 por ciento que lo hace en un centro médico (45,6 %) o una farmacia (16,2).

Ocho de cada diez encuestados desconocía que es recomendable no haber ingerido ningún alimento en la media hora anterior a la medición o que los tensiómetros deben calibrarse periódicamente.

Los tensiómetros, también los domésticos, requieren chequeos o calibrado cada dos años, aproximadamente.

El 77 por ciento de la población encuestada reconoció medirse la tensión con poca frecuencia, frente a un 1,3 por ciento que se tomaba la medición a diario, un porcentaje que aumenta hasta el 4,3 en el caso de los adultos con edades superiores a los 55 años.

Se trata de unos porcentajes muy bajos, si se considera el hecho de que una de cada tres personas hipertensas no lo saben.

Además, cinco de cada diez pacientes desconocía la postura correcta para llevar a cabo la medición de la presión arterial, una cuestión importante ya que una mala posición del brazo en el momento de la medición puede modificar el resultado. El punto de medición debe estar situado a la altura del corazón.

A este estudio se une otro que ha querido recordar hoy el Consejo General de Farmacéuticos y que señala que el 44 por ciento de los pacientes hipertensos desconoce para qué es el medicamento que utiliza y un 48 por ciento no sabe cómo utilizarlo.

Se trata de un estudio realizado entre los años 2006 y 2007 por 3.500 farmacéuticos de toda España y en el que participaron cerca de 10.000 pacientes hipertensos.

Los resultados desvelaron también que una tercera parte de los pacientes incluidos reconocieron ser fumadores y de ellos la cuarta parte no seguían una dieta pobre en grasas o sal.

Coincidiendo con esta fecha, el Consejo ha elaborado además un informe técnico en el que se repasa la importancia de una correcta medida de la presión arterial, su epidemiología e impacto socioeconómico, la prevención, el tratamiento, y la labor del farmacéutico en la adherencia a los tratamientos.

El tratamiento de la hipertensión implica cambios de estilo de vida del paciente, con lo que hay que identificar y evitar hábitos cotidianos nocivos, como una alimentación rica en grasas o sal, sobrepeso u obesidad y sedentarismo, abuso de bebidas alcohólicas y el tabaquismo, entre otros.

En el ámbito preventivo, el reto es identificar a los pacientes hipertensos ocultos y, posteriormente, conseguir que conozcan el correcto proceso de uso y sigan el tratamiento prescrito, especialmente si existen factores de riesgo cardiovascular.